Reflexoterapia podal: qué es y qué beneficios tiene

¿Has oído hablar de reflexología podal o reflexoterapia podal? ¿Sabes que los órganos del cuerpo se reflejan en el pie como si fuese un mapa?

✎ Autor:  Pablo Sánchez

La reflexoterapia podal es una técnica natural que te permite obtener bienestar físico y emocional a través de tus pies. ¿Te has preguntado alguna vez cuánto estrés acumulan tus pies día tras día? Este enfoque de la salud busca aliviar ese estrés, revitalizando tu cuerpo entero.

Es una técnica terapéutica basada en la estimulación de puntos en los pies, conocidos como zonas reflejas. Cada una de estas zonas se correlaciona con diferentes órganos y sistemas del cuerpo. ¡Imagina que tus pies son un mapa de tu salud!

¿Qué es la reflexoterapia podal?

La reflexología podal o reflexoterapia podal es una terapia manual basada en la existencia de zonas reflejas en los pies que representan a todos los órganos y las partes del cuerpo, los cuales pueden tratarse a distancia mediante la simple presión o el masaje de esos puntos.

Esta técnica curativa alternativa permite actuar sobre un síntoma determinado o aliviar un dolor, pero también regular la función de un órgano enfermo, mejorar la circulación corporal, favorecer la eliminación de los desechos y las toxinas y estimular la energía del organismo a fin de evitar nuevos desequilibrios.

Constituye una verdadera práctica holística de salud (griego holos, entero, es decir, que intenta tratar al individuo en su totalidad), a la vez preventiva, fuente de bienestar y curativa a través de la relajación. Su acción favorece una recuperación más rápida del estado general, especialmente en periodos de convalecencia o postoperatorio.

El término “reflexología” viene de la palabra etimológica “reflejo” que se define como una “contracción muscular involuntaria provocada por un estímulo externo”. En el pie se refleja tensiones, dolores, enfermedades o bloqueos relacionados con diversos órganos y con el masaje o puntos de presión se consigue que se disperse la retención de la energía responsable del desequilibrio.

«La Reflexoterapia Podal es un viaje al bienestar total, iniciado por los pies.»

Mediante la reflexoterapia podal o reflexología podal, se actúa sobre el conjunto de los sistemas orgánicos, circulación sanguínea, sistema linfático, endocrinos y neurológico, a fin de tratar el órgano enfermo. Los pies no son las únicas zonas de tratamiento mediante reflexología podal también las tienen son las manos y las orejas que tiene n el reflejo del organismo en su totalidad.

Características

Descripción

Terapia La reflexoterapia podal es una terapia alternativa que se centra en aplicar presión en puntos específicos de los pies para estimular órganos y sistemas del cuerpo.
Origen Se originó en la antigua China y ha sido practicada durante siglos en diferentes culturas alrededor del mundo.
Beneficios Ayuda a relajar el cuerpo, mejorar la circulación sanguínea, aliviar el estrés, estimular el sistema inmunológico y promover un equilibrio general.
Puntos reflejos Se cree que los pies contienen puntos reflejos que corresponden a diferentes partes del cuerpo. Estimulando estos puntos, se puede influir en el estado de salud de cada área correspondiente.
Técnica La técnica principal utilizada es la presión con las manos, los dedos o instrumentos especiales sobre los puntos reflejos de los pies. También se pueden utilizar aceites esenciales y otras técnicas complementarias.
Duración Las sesiones suelen durar entre 30 minutos a una hora, dependiendo de las necesidades individuales de cada persona.

La reflexología podal es a la vez un arte, ya que requiere una gran habilidad, una técnica precisa, una forma de escuchar al otro y una ciencia, ya que sus bases son fisiológicas y neurológicas.

ℹ La Reflexoterapia Podal considera tus pies como un mapa del cuerpo entero. ¡Explora y mejora tu salud a través de ellos!

reflexoterapia podal o reflexología podal

¿Cuál es el origen de la reflexoterapia podal?

Según una teoría muy extendida, la reflexología podal procede del antiguo Egipto. Hay pruebas de un pictograma encontrado en la tumba de Saqqara que data de 2500 a 2330 a.C. Se trata de Ankmahor, un médico egipcio cuyo rango es muy importante va justo después del rey. El pictograma representa 4 figuras de las cuales, uno realiza un masaje en los pies y la otra figura realiza un masaje en las manos.

En los incas hay algunos testimonios indican que el origen de la reflexoterapia podal se remota a una de las civilizaciones más antiguas hace unos 12.000 años a.C. Y esta civilización habría transmitido su saber a los indígenas de América del Norte, a día de hoy los practican los cherokees de Carolina del Norte.

Hace más de 5.000 años, en India y China se conocía una forma de tratamiento que consistía en la presión sobre ciertos puntos de los pies.

Existe una relación entre la reflexoterapia podal y la medicina tradicional china la acupuntura. Por ello, muchos tratamientos incluyen siempre aplicación de agujas en estas zonas o el masaje mediante presión.

Los textos hablan de un doctor Wang Wei del siglo IV a.C. trataba a sus pacientes mediante presiones intensas de los pulgares en la planta de los pies. Este tipo de tratamiento era un poco desconocido en Occidente hasta 1883, hasta que un médico holandés llamado Ten Thyne publicó el primer tratado de acupuntura china.

En Europa existen pruebas de la práctica de la reflexoterapia podal o reflexología podal ya en el siglo XVI. El famoso escultor italiano Cellini la utilizaba con éxito para curar sus propios males.

Los doctores Adamus y Atatis escribieron una obra sobre el tratamiento de las zonas reflejas en 1582. Y les siguieron los doctores Ball, Sir Henry Head que este último su estudio fue enfocado sobre las bases neurológicas de las zonas reflejas, descubriendo en 1898 que ciertas zonas de la piel se vuelven hipersensibles cuando un órgano está enfermo. Ivan Palov (1849-1936) descubrió que un estímulo puede utilizarse para producir una reacción condicionada.

Paralelamente en Alemania, se desarrolló un gran interés por los masajes de las zonas corporales, que tenía efectos terapeúticos por estimulación a distancia de las vías reflejas. Y por último el doctor Alfons Cornelius publicó en 1902 una obra, Puntos de presión, origen e implicaciones, frutos de sus experiencias personales.

En Estados Unidos el doctor William Fitzgerald conocido por ser el padre fundador de la reflexoterapia podal o reflexología podal moderna. Conoció los trabajos del doctor Harry Bond Bressler, que había estudiado los tratamientos mediante digitopuntura.

Siendo jefe del hospital donde trabajaba siguió investigando y probó sus teorías en muchos de sus pacientes. Gracias a sus conocimientos de digitopuntura, pudo incluso realizar intervenciones quirúrgicas utilizando como única técnica anestésica la presión sobre ciertos puntos de los dedos, mediante cintas o pinzas.

En 1917 publico una obra titulada Terapia zona en aquella época Fitzgerald no presto atención particular a las zonas específicas de los pies.

Durante un tiempo su obra tuvo poca repercusión, más bien escéptico hasta que el doctor Joseph Riley, quedó convencido de estos descubrimientos y estudió, con Fitzgerald, las técnicas de Terapia Zona que después se utilizó estas técnicas durante más de 40 años y publicó en 1919 Terapia de zona simplificada en la que aporta sus propios descubrimientos, especialmente 8 nuevas divisiones del cuerpo en sentido horizontal.

Por casualidad la doctora Eunice Ingham (1879-1974), entonces fisioterapeuta tuvo conocimiento de esta técnica e inmediatamente la introdujo en su servicio de fisioterapia que tuvieron buenos resultados dimitiendo de su hospital para dedicarse a la investigación de la reflexoterapia podal dando congresos, tanto que abrió la primera escuela de formación dedicada a la reflexología podal.

Poco a poco, consiguió establecer un mapa completo de las zonas reflejas del cuerpo a nivel de los pies y publicó dos libros, uno de ellos es Historias de los pies pueden contar a través de la reflexoterapia podal. Continuó trabajando hasta la muerte. Su sobrino, Dwight Bayers, continúa su labor en el seno del Instituto Internacional de la Reflexología podal (Estados Unidos).

¿Cómo Funciona la Reflexoterapia Podal?

La terapia comienza con un masaje relajante para preparar los pies. Luego, el terapeuta aplica presión sobre áreas específicas de los pies para provocar respuestas en los órganos correspondientes. Pero ¿Cómo es eso posible?

Sistema Nervioso

Estimulación

1 Los pies están llenos de terminaciones nerviosas. La presión estimula estas terminaciones.
2 Los nervios conectan los pies con todo el cuerpo. Estimulación genera impulsos nerviosos.
3 Impulsos viajan hacia los órganos correspondientes. Los impulsos provocan respuestas en los órganos.
4 Las respuestas pueden incluir alivio del dolor, relajación, mejora en la circulación, entre otros. Los resultados varían según cada individuo y su estado de salud.

Al final de la sesión, te sentirás relajado y renovado. Pero los efectos no se limitan al momento de la terapia. Al estimular la auto-curación del cuerpo, la reflexoterapia podal tiene beneficios a largo plazo.

Beneficios de la Reflexoterapia Podal

A continuación vemos algunos de los beneficios de la reflexoterapia podal:

  • Relajación: La reflexoterapia podal puede aliviar la tensión y el estrés, promoviendo un estado de relajación y calma.
  • Mejora la circulación: Este método puede ayudar a mejorar la circulación sanguínea y linfática, nutriendo tus órganos y tejidos.
  • Desintoxica el cuerpo: Al mejorar la circulación, también facilita la eliminación de toxinas del cuerpo.
  • Estimula la curación: Al promover el equilibrio en el cuerpo, la reflexoterapia podal puede acelerar la recuperación de diversas condiciones de salud.
ℹ Al estimular el equilibrio del cuerpo, la Reflexoterapia Podal puede ser un poderoso aliado en tu camino hacia el bienestar.

«La Reflexoterapia Podal no sólo busca aliviar dolencias, sino promover un estado de salud y bienestar óptimo.«

pies antes de masaje de reflexoterapia podal

¿Cuáles son las bases de la reflexología podal?

La reflexología podal se basa en la representación que tiene las zonas reflejas de los órganos del cuerpo en la planta de los pies. La mayor parte de los órganos y estructuras del cuerpo humano tienen una conexión y se hallan representado en la planta de los pies, de esta manera es posible influir y activar diversas partes del organismo. Los pies son el espejo del cuerpo.

Cuando un órgano se encuentra en situación patológica, su zona refleja de los pies se torna dolorosa e hipersensible a la presión.

El punto reflejo correspondiente marca la existencia de un funcionamiento anómalo, de una función orgánica activa o todavía latente, por lo que, si hacemos un masaje en el punto doloroso lo que vamos a conseguir poner en marcha esos mecanismos que necesita el organismo para volver a su estado fisiológico normal para la curación. No es imprescindible sufrir dolor orgánico o disfunción para hallar zonas reflejas sensibles en los pies.

Tanto la cabeza y el cuello se hallan reflejados en el pie del lado opuesto. La excepción a esta regla sería los individuos zurdos, en las cuales cada hemilado de la cabeza y cuello se halla representado en su lado correspondiente.

No todos los órganos se hallan representados en la planta del pie, ya que existen ciertos puntos situados en torno al tobillo y en la cara dorsal del pie que representan órganos y estructuras del cuerpo.

A día de hoy hay dos vertientes para la reflexoterapia podal; la primera vertiente por Eunice Ingham en la que habla que las personas se pueden hacer su propia reflexoterapia podal o reflexología podal y la otra vertiente es la que practica todo los del ámbito sanitario y tener unos conocimientos básicos del cuerpo humano, pero muy especialmente de la anatomía topográfica del pie.

También en las manos existen similares puntos reflejos y fue desarrollada la reflexología podal de las manos por Mildred Carter, estos puntos de la reflexoterapia podal o reflexología podal de las manos se hallan situados en la planta de la mano y los dedos.

Estructura del pie

El pie es un formidable instrumento mecánico formado por 26 huesos imbricados de tal manera que, junto con los músculos y los tendones, constituyen los verdaderos amortiguadores del cuerpo que permiten la verticalidad. Los pies son flexibles y se adaptan a cualquier tipo de suelo, lo cual permite el contoneo del cuerpo y una marcha armoniosa.

  • La parte posterior del pie está formado por el astrágalo y el calcáneo. El astrágalo es el único hueso que se articula con la tibia y soporta todo el peso del cuerpo; el calcáneo es el hueso más largo y más sólido del pie.
  • La parte central del pie está formado por el escafoides, las tres cuñas y el cuboides, alrededor del cual se articulan casi todos los huesos del pie.
  • La parte anterior del pie está formada por los cinco metatarsianos y las falanges; los cinco metatarsianos comprenden una base, una caña y una cabeza. La base de los tres primeros se articula con la segunda y la tercera cuña.
  • Los dedos. El dedo gordo está formado por dos gruesas falanges. Los otros cuatros dedos tienen tres falanges, formadas, como los metatarsianos, por una base, una caña y una cabeza.
  • El pie es una estructura muscular y ligamentos que permite mantenerse de pie y moverse. La planta del pie es rica en terminaciones nerviosas y contiene innumerables receptores, que nos informan sobre la marcha y permiten la coordinación motora, la estática y el equilibrio del cuerpo. El cerebro coordina el conjunto de las cadenas musculares para permitir la bipedestación.

reflexoterapia podal masaje

Análisis de la reflexoterapia podal

Las ventajas de la reflexoterapia podal:

  • La reflexoterapia podal, es un método relativamente sencillo.
  • Con cierta práctica y experiencia es inocuo y eficaz.
  • La reflexoterapia podal, es un método de diagnóstico y terapéutico.
  • La reflexoterapia podal, es compatible con otras terapéuticas físicas e incluso con terapéuticos medicamentosos.
  • Con ella se trata enfermedades de los órganos internos y también del aparato locomotor.
  • Las zonas y puntos para la digitopresión son fácilmente asimilables, a diferencia de la acupuntura china, que requiere otros conocimientos, otra filosofía, otra manera de pensar y en especial conocer y en especial conocer pulsos, meridianos y puntos.
  • Se puede realizar autosesiones, si bien la falta de cono cimiento técnico puede restarle eficacia.

¿Qué ocurre cuando se ejecutan las presiones en la reflexoterapia podal?

Cuando realizamos presiones y micropresiones con la punta de los dedos sobre los puntos correspondientes a órganos y aparatos representados en los pies se restablece un equilibrio del órgano. Surgen sensaciones relajantes, disminución o supresión del dolor y distensión de músculos, y se alivian las tensiones de todo el cuerpo.

La aplicación de la reflexoterapia podal de forma indiscriminada, por aficionados o terapeutas principiantes que no reconozcan sus limitaciones, puede resultar totalmente ineficaz o incluso contraproducente.

Zonas y puntos en la reflexoterapia podal

Cada órgano humano está representado por su zona refleja en el pie. Los órganos pares se hallan representados en ambos pies.

Los órganos impares están representados en el pie correspondiente al lado del cuerpo en que se hallen situados. Y los órganos centrales se localizan en las caras internas de ambos pies.

La planta del pie corresponde órganos y vísceras en su mayoría. El borde interno de ambos pies corresponde a la columna vertebral. El resto de huesos, músculos, articulaciones y nervios se localizan en el dorso del pie.

Hay puntos sensibles en la planta de los pies que se trata de un bloqueo energético en la región correspondiente órgano o bien un exceso de presión en dicho órgano.

Zonas reflejas del pie

Es importante memorizar esta topografía para poder analizar los puntos dolorosos y realizar un tratamiento adecuado según la afección o el órgano afectado.

zonas de reflexoterapia podal

Sistema óseo

El esqueleto humano está formado por 206 huesos. Tiene diferentes formas y longitudes. El esqueleto realiza tres funciones: sostener el cuerpo; proteger los órganos internos y permitir la movilidad y los movimientos de la articulación.

Las zonas reflejas de la columna vertebral se sitúan a lo largo del borde interno del pie: la zona de las cervicales a lo largo de la primera falange; la zona de las dorsales a lo largo de la cuña y la navicular; la zona del sacro a lo largo del calcáneo y la zona del coxis en la parte media del calcáneo.

La zona refleja de la caja torácica se encuentra a nivel de los metatarsianos, en la parte superior. La articulación del hombro y la cintura escapulohumeral su zona refleja se encuentra en las articulaciones metatarsofalangicas I a Ven la parte superior del pie. El codo y el brazo su zona refleja se encuentra en la articulación del metatarso con el cuboides. Y la zona refleja del antebrazo es el borde lateral del metatarso.

La pelvis su zona refleja se encuentra en la parte posterior del tarso. La cadera tiene dos zonas reflejas: una bajo el maléolo externo de cada pie y la segunda bajo los bordes externos de cada pie por delante de la posterior del quinto metatarsiano. La rodilla su zona refleja se sitúa a nivel de la parte posterior del quinto metatarsiano.

Sistema cardiovascular

La zona refleja del corazón se sitúa por detrás de la cabeza del tercero y el cuarto metatarsianos, en la parte inferior del pie izquierdo. Esta zona tiene relación con los pulmones, porque éstos aseguran la oxigenación de la sangre y la eliminación del gas carbónico.

Aparato respiratorio

Las vías respiratorias superiores su zona refleja está situada en el borde externo de cada dedo gordo. Los senos paranasales las zonas reflejas se sitúan en la parte superior de los dedos II a V.

Los senos frontales se encuentran en los dedos II y III, y los senos maxilares en los dedos IV y V. La laringe y la faringe su zona refleja se sitúa en la base del dedo gordo y entre éste y el segundo dedo, en medio de los dos dedos. La tráquea su zona refleja une la de la laringe con la de los pulmones en la caja plantar de los dos pies.

Los bronquios y los pulmones su zona refleja se encuentra en parte anterior del pie, en la cara plantar, a lo largo de la mitad distal de los metatarsianos centrales II, III y IV. El diafragma su zona refleja forma una curva situada en la parte central de los metatarsianos I a V.

Sistema linfático

La linfa circula por unos capilares muy finos que se reúnen para formar los vasos linfáticos como las venas por un sistema valvular.

Los ganglios linfáticos su función es filtrar y producir linfocitos (glóbulos blancos) Son importantes para el sistema inmunitario y la defensa del organismo.

Las amígdalas formadas por un amasijo de tejido linfático. Es la defensa contra las infecciones de la faringe y la garganta.

El bazo situado en el hipocondrio izquierdo y es también un órgano linfoide encargado de la defensa inmunitaria y desempeña un papel de filtro, es capaz de liberar una gran cantidad de los glóbulos rojos a la circulación sanguínea.

Las zonas reflejas del sistema linfático: parte superior del cuerpo: delante del maléolo externos; parte inferior del cuerpo: delante del maléolo interno; parte torácica: entre el primero y el segundo metatarsianos; amígdalas y faringe: en la parte superior del dedo gordo; bazo: por debajo de la zona del corazón en el pie izquierdo; apéndice vermiforme: por debajo de la zona del colón ascendente, el pie derecho; timo: por encima de la zona refleja del esternón, en el último tercio del primer metatarsiano.

Aparato digestivo

La boca su zona refleja se sitúa en parte superior del dedo gordo, en la mitad del distal. Los dientes su zona refleja se sitúan en los bordes mediales y laterales de los dedos II a V. El esófago su zona refleja está justo por encima del estómago, por detrás de la cabeza del primer metatarsiano.

El estómago su zona refleja se encuentra justo por detrás de la cabeza del primer metatarsiano de cada pie. El duodeno su zona refleja está junto a la del estómago, bajo las cuñas.

El hígado y ola vesícula biliar su zona refleja se sitúa en la parte inferior del pie derecho y recubre casi toda la zona posterior a las cabezas de los metatarsianos IV y V. El páncreas su zona refleja se encuentra en las articulaciones del metatarso con el tarso anterior, en los bordes internos de las bóvedas plantares.

El intestino delgado su zona refleja se encuentra a la vez en el pie derecho y en el pie izquierdo, sobre el cuboides, el escafoides el calcáneo.

El intestino grueso sus zonas reflejas son: el colón ascendente: en la parte inferior del pie derecho, a lo largo del calcáneo y el cuboides, hasta la base del quinto metatarsiano; colón transverso: en el centro de cada pie, a la altura de la primera, segunda y tercera cuña, colón descendente: en la parte inferior del pie izquierdo, en la parte lateral del cuboides y el calcáneo; colón sigmoide y recto: en la parte inferior del pie izquierdo, después del colón descendente, hacia el borde interno a nivel calcáneo; ano: en el punto se encuentra justo por detrás de la zona refleja del recto.

Sistema endocrino

La hipófisis su zona refleja se encuentra justo en el centro de la cara plantar del dedo gordo, donde reúnen las líneas digitales, debajo de la falange distal.

El tiroides su zona refleja del tiroides se sitúa debajo de la cabeza del primer metatarsiano de cada pie. Las paratiroides su zona refleja se encuentra en el borde interno del pliegue del dedo gordo. Las suprarrenales la zona refleja está justo por encima de la zona de los riñones.

Órganos genitales

Órganos femeninos. Los ovarios y trompa su zona refleja se encuentra por detrás del maléolo externo de cada pie, en el lado opuesto a la zona refleja del útero.

El útero su zona refleja se sitúa por detrás y por encima de los maléolos internos. La vagina su zona refleja está unida a la del útero. Las mamas su zona refleja está situada en la zona costal, en la parte superior del pie, sobre la parte proximal del segundo, tercero y cuarto dedos.

Órganos masculinos. El pene su zona refleja se encuentra al mismo nivel que la de la vagina de la mujer, entre las de la vejiga y la de la próstata.

Los testículos su zona refleja son las mismas que las de los ovarios en la mujer, la parte posterior del maléolo externo de cada pie. La próstata la zona refleja es la misma que la zona del útero en a mujer, en la parte posterior y por encima de los maléolos internos.

Aparato urinario

Los riñones la zona refleja se encuentra en el centro de la planta del pie. El primer punto del meridiano de riñón en acupuntura se sitúa también en el centro de la bóveda plantar. Recibe el nombre de “la fuente que nace”.

La vejiga su zona refleja se encuentra en el borde interno del pie, debajo d la pequeña zona blanda que se encuentra justo por delante del talón. Los uréteres su zona refleja se sitúan en la parte inferior de cada pie, entre las zonas de los riñones y la vejiga. Forman una línea desde el hueso navicular hasta la zona refleja de la vejiga.

Sistema nervioso y órganos de los sentidos

El cerebro su zona refleja se encuentra en el pulpejo del dedo gordo. El hemisferio izquierdo está representado en el pie derecho, y el hemisferio derecho, el pie izquierdo.

El cerebelo la zona refleja del cerebelo se encuentra en el pulpejo del dedo gordo, justo antes de la articulación. Las zonas reflejas indirectas, relacionadas especialmente con el oído interno y el equilibrio corporal, se encuentran en ambos pies, en el pulpejo de dos dedos II y III, y en el nacimiento del IV y el V dedos.

La médula espinal la zona refleja es idéntica a la zona de la columna vertebral, en el borde interno de ambos pies. Plexo solar la zona refleja se sitúa en el hueco posterior de cada antepié, bajo la bóveda plantar. El nervio ciático su zona refleja forma un puente sobre el calcáneo, aproximadamente a la altura del maléolo.

Después del tendón de Aquiles, se encuentra una segunda zona, en el mismo lugar, en la parte lateral. Una última zona refleja atraviesa lateralmente la parte superior del talón, en la bóveda plantar.

Los ojos su zona refleja se encuentra en el hueco entre el segundo y el tercer dedo de cada pie, la zona del ojo derecho se sitúa en el pie izquierdo y la del ojo izquierdo en el pie derecho.

Los oídos su zona refleja está situada en la parte inferior del pie, entre el cuarto y el quinto dedo, también invertida: el oído derecho en el pie izquierdo y el oído izquierdo en el pie derecho.

reflexoterapia podal

Condiciones previas a tener en cuenta en la reflexoterapia podal

Para que una sesión de masaje de reflexoterapia podal sea eficaz se requieren una serie de condiciones:

  • Limpieza e higiene escrupulosa de la sala, camilla, resto mobiliario e instalación.
  • Ambiente tranquilo, temperatura agradable, con música suave y relajante.
  • Por parte del terapeuta: manos-dedo diestros y hábiles, uñas recortadas. Las uñas NUNCA deben clavarse en los tejidos del pie. Dotes de conversación y conocimientos técnicos.

Existe una serie de características propias y concretas para esta modalidad de reflexoterapia podal:

  • La experiencia. Haber trabajado previamente con un acreditado terapeuta en reflexoterapia podal. Realizar numerosos cursos y seminarios para contrastar opiniones, experiencias y adquirir una técnica depurada.
  • Conocer los puntos que se van a presionar. Es aconsejable tener a la vista un mapa de distribución de los puntos y zonas reflexógenas de los pies. Con la práctica, iremos reconociéndolos con más facilidad y confianza, por simple intuición.
  • El paciente se ha de colocar y sentir cómodo. En una camilla especial bien acolchada, ligeramente incorporado y aflojadas las prendas que aprieten: sujetador, cinturón, faja, corbata. Etc.
  • El terapeuta debe controlar perfectamente las reacciones y sensaciones que pudieran aparecer en el rostro del paciente a lo largo de la sesión.
  • Los pies deben estar muy accesibles, de manera que permitan su manipulación cómoda.
  • Los pies estarán perfectamente limpios, secos y libres hasta la rodilla, calientes y asépticos
  • Se una cremas y aceites.
  • Se utiliza el dedo pulgar por ser más potente y el que mejor adapta, por su fuerza y misión de oposición, para realizar las digitopresiones. En caso de fátiga, el terapeuta podrá usar el dedo índice o el medio, aunque son recomendables por su debilidad.
  • Las técnicas son compatibles con otras técnicas de masaje, tanto clásico como reflexoterapia podal, shiatsu, linfático, etc. En estos casos la duración del masaje previo será unos 8-10 minutos.
  • Acudir al podólogo si hay callosidades, durezas, “unas encarnadas”.
  • En Oriente en vez de utilizar las manos para el masaje se utiliza objetos puntiagudos.
  • Se trabajará completamente un pie y después se pasará al otro

Sesión del masaje de reflexoterapia podal

A continuación veremos qué aspectos tener en cuenta a la hora de realizar una sesión de reflexoterapia podal:

Normas importantes a tener en cuenta

  • En la reflexoterapia podal, primero realizar unas movilizaciones de las articulaciones del tobillo, subastragalina, metarsofalángicas y dedos.
  • Después un ligero masaje de 3-4 minutos de reflexoterapia podal, tipo centrípeto, hasta la parte media de la pierna
  • El pie masajeado se sujeta firmemente por los dedos con una mano. Con la otra mano se realiza presiones. Y pudiendo alternar ambas manos para el masaje.
  • Para las presiones se utiliza fundamentalmente la punta del pulgar justamente en la zona que se separa la uña, realizando una presión moderada a intensa
  • Tipos de presiones utilizadas en la reflexoterapia podal: presiones mantenidas, presiones circulares, presiones deslizantes, presiones “en pinza”, presiones con nudillos (uno o ambos)
  • En algunas escuelas de reflexoterapia podal se aplica objetos de madera, plástico, metal o goma para efectuar las presiones. No muy recomendables ya que se pierde el tacto.
  • Ciertos puntos reflejos pueden variar sensiblemente de localización dependiendo de las personas.
  • Las zonas de más dolor son las que conviene tratar con más insistencia y precisión.
  • A veces podemos encontrar zonas casuales reflejas o secundarias, que pueden estar también irritadas.
  • Se recomienda presiones lentas, suaves y profundas, mantenidas para la inhibición y las presiones rápidas para la estimulación.

Su recorrido sucesivo es:

  • La línea diafragmática
  • Zona de la columna
  • Presiones bajo el talón
  • Presiones del tobillo
  • Seguir el sentido distal a proximal, desde los dedos al talón.

¿Cuánto debe durar la sesión de reflexoterapia podal?

A continuación veremos cuánto debe durar una sesión de reflexoterapia podal:

  • Cada sesión de reflexoterapia podal requiere unos 30 a 40 minutos en total. Un tiempo fijo no se debe establecer, ya que cada paciente va a ser un caso particular.
  • Repartido este tiempo en ambos pies.
  • La primera sesión suele ser más breve, entre 10 y 12 minutos o un máximo de dedicados a cada pie. El objetivo es no ejercer demasiados estímulos sobre órganos ya dolorosos o congestionados.
  • En total suelen ser necesarias unas 15 a 20 sesiones de reflexoterapia podal para un tratamiento completo.
  • La secuencia de reflexoterapia podalserá de una sesión diaria o en días alternos.
  • En caso de autotratamientos se puede efectuar dos veces al día. También en los casos agudos.
  • En este último supuesto las sesiones de reflexoterapia podal suelen ser más cortas, de unas 10 o 15 minutos.

Posibles reacciones a la reflexoterapia podal

A continuación veremos posibles reacciones de la reflexoterapia podal:

  • La sensación de relajación y cansancio que se puede experimentar después de las primeras sesiones es natural.
  • También la necesidad de orinar, defecar, hipersudoración, desasosiego, cambios de expresión, suspiros. Es conveniente que tranquilicemos al paciente, comentándole las posibles reacciones.
  • Con la reflexoterapia podal, a la larga pueden aparecer también trastornos de sueño, poliuria, diarreas, sudoración y dolor en el órgano afectado. Suelen ser pasajeros.
  • Las lesiones agudas y recientes suelen responder más rápidamente a las sesiones de reflexoterapia podal que las crónicas.
  • Los pacientes de reflexoterapia podal con pies delgados y sin panículo adiposo suelen responder más eficazmente al tratamiento que aquellos con pies gruesos, llenos de cojines adiposos, celulitis, edemas, etc. En estos se hace más difícil alcanzar los puntos reflejos.

Cuidados del pie a tener en cuenta a mayores de la reflexoterapia podal

A continuación analizaremos prácticos consejos para el cuidado de los pies:

Andar descalzo

Según los chinos captamos la energía terrestre por medio de los pies en contacto con el suelo. Dentro del calzado de ciudad generalmente ajustados, la circulación energética está obstruida en los puntos de los meridianos que salen o llegan a los dedos, lo cual da lugar a bloqueos energéticos secundarios que tienen repercusiones sobre todo el organismo.

Los zapatos no suelen respetar la estática vertebral, debido a los tacones altos o las formas mal adaptadas a la curvatura del pie, lo que produce trastornos lumbares y articulares.

Los extremos acabados en punta de ciertos zapatos femeninos favorecen también ciertas enfermedades específicas de los pies, como el hallux valgus. Por todas estas razones, es esencial caminar lo más a menudo posible con los pies descalzos preferente mente en contacto con elementos naturales como la tierra, la hierba o la arena, que desempeñan el papel toma de tierra.

Haga regularmente ejercicios de equilibrio

Es conveniente ejercitarse con un pie y después con el otro. Este ejercicio refuerza los mensajes percibidos por el conjunto de la planta del pie en el centro equilibrio. En efecto, con la edad, el equilibrio es una de las primeras facultades físicas que se pierden. Por lo tanto, trabaje su equilibrio regularmente.

Los cuidados de los pies

Un pie elimina un promedio de media taza de transpiración al día. La asociación de sudor y calor proporciona las condiciones propicias para el desarrollo de dermatosis.

Para evitarlas, respete ciertos principios básicos: lávese los pies regularmente, después séquelos vigorosamente, sobre todo entre los dedos, para mantenerlos bien secos. Córtese las uñas con un corte horizontal. Utilice cremas podológicas contra la transpiración o para la hidratación, en caso de piel seca.

Ejercicios recomendados

  • Enrolle el pie y después desenróllelo para flexibilizarlo apoyándose en el suelo, del talón hacia los dedos y después en sentido inverso.
  • Póngase de puntillas, permanezca así un momento, un minuto o dos, de pie sobre la punta de ambos pies, si tiene suficiente equilibrio, cargue el peso del cuerpo sobre una sola pierna y después sobre la otra.
  • Ahora realizamos el ejercicio inverso del anterior, cargue todo el peso del cuerpo sobre la parte posterior de los pies, sobre los talones. De forma alterna.
  • Utilice una pelota flexible, una pelota de tenis, y hágala rodar bajo la planta del pie.
  • Apóyese sobre los bordes laterales. Cargue el peso del cuerpo progresivamente sobre el borde lateral externo del pie izquierdo durante uno o dos minutos, y después haga lo mismo con el borde lateral interno.
  • Manténgase de pie con los dedos enrollados hacia el interior para reforzar la bóveda plantar.
  • Colóquese de pie, con la espalda recta, los pies separados a la anchura de los hombros y las rodillas ligeramente flexionadas. Intente oscilar ligeramente de derecha a izquierda, de un pie al otro.
  • Posición sentada, sujétese el pie, con una pierna cruzada sobre la otra, y realícese cinco movimientos rotatorios del tobillo en un sentido y después en el otro.
  • Tire de los dedos en bloque en un sentido y después en el otro, cinco o seis veces seguidas. Aplique un masaje en cada uno de los espacios entre los dedos y también toda la planta. Hazlo en cada pie

Automasajes de pies

  • Después de calentar las manos, dé un masaje energético a toda la bóveda plantar y seguidamente a la parte superior del pie, con las palmas de las manos.
  • Aplique el masaje con el puño cerrado, y realice un movimiento giratorio presionando la planta del pie. Efectúe la misma maniobra a diferentes niveles, desde el talón hasta los dedos.
  • Golpee con golpecitos breves y secos la planta del pie con el puño.
  • Dé un masaje a las cinco líneas internas, empiece en el punto central de la línea a partir del talón y aplique el masaje, presionando con el pulgar, en cada una de las cinco líneas en dirección a los dedos.
  •  Dé un masaje a las cinco líneas externas: empiece de la misma manera en el punto central de la parte superior del pie, en el pliegue del tobillo y entre los dos primeros tendones, y aplique el masaje en las cinco líneas mediante un movimiento rotatorio del pulgar.
  • Rotación de los dedos: efectúe un movimiento rotatorio de los dedos de los pies, primero en un sentido y luego en el otro, seguido de un ligero estiramiento. Apriete cada dedo entre el pulgar y el índice.
  • Realice un masaje en el tendón de Aquiles de abajo a arriba, siempre con el pulgar y el índice, mediante presiones sucesivas.
  • Drenaje: sujete el pie con las dos manos, con la palma en los bordes laterales, a fin de ejercer una presión durante unos diez segundos sobre la bóveda plantar, después actúe de la misma forma desplazándose unos centímetros hacia los talones, y así sucesivamente hasta el tobillo.
  • Movilización de los dedos: sujete con la mano el conjunto de los cinco dedos de los pies efectúe un movimiento energético de flexión y extensión de los cinco dedos, varias veces seguidas.
  • Maniobra final: efectúe cinco rotaciones del tobillo en un sentido y después en el otro. Seguidamente sujétese el tobillo y sacuda energéticamente el pie, tres o cuatro veces seguidas, con el pie flexible y relajado.
  • Realice el conjunto de los ejercicios de automasaje en el otro pie.
  • Automasaje de pies con aceites esenciales.
  • Aceite de masaje.
  • Baño de pies.
  • Antifatiga de los pies.
  • Pies hinchados.
  • Estimulante y tónico.
  • Pomada para la piel rugosa.
  • Pomada hidratante.
  • Pomada antitransparente para los pies cansados.
  • Dermatosis infecciones de la piel.
  • Pies doloridos.
  • Calambres en los pies.

Indicaciones y contraindicaciones de la reflexoterapia podal

El masaje de reflexología podal o reflexoterapia podal tiene por objeto restablecer la circulación energética normal en el organismo. Por vía refleja, actúa también a distancia sobre diferentes órganos para tratar o prevenir afección. El objetivo es.

  • Prevención: de ciertas zonas son dolorosas incluso antes de que se manifieste en ellas una enfermedad. Su tratamiento permite entonces regular el órgano antes de la aparición de los signos clínicos.
  • El tratamiento permite con frecuencia disminuir la dosis de los medicamentos, así como reducir sensiblemente los periodos de convalecencia o postoperativos.
  • Estreñimiento, dolores viscerales en general, dolores de columna, Dolores del aparato locomotor.
  • Contracturas musculares, afecciones vasculares, neuralgias, migrañas, ciatalgias, estrés, agotamiento físico, fatiga y trastornos menstruales.

La reflexología podal es una técnica formidable para el bienestar y la relajación. En una época en que las causas de estrés se multiplican como la angustia, la ansiedad, la depresión, el insomnio, etc, es importante saber cómo recuperar la relajación y la calma interior.

El masaje de los pies mediante reflexoterapia podal proporciona una profunda sensación de relajación, ya que actúa sobre el conjunto del cuerpo eliminando la tensión y el bloqueo. También permite establecer un contacto armonioso entre la persona que lo recibe y la que da el masaje, en un respeto mutuo que hace posible “soltar prenda” con respecto a los conflictos y las tensiones psicológicas.

La reflexoterpia podal, si se hace por la mañana, dinamiza y ayuda a pasar una maravillosa jornada sin exceso de fatiga. Si se hace por la noche antes de acostarse, relaja y facilita un sueños profundo y reparador. Las personas no tienen tiempo y las que rechazan el contacto sobre el conjunto del cuerpo disponen de otra forma de realizar masajes completos con respeto a otros tipos de masaje.

Existen algunas contraindicaciones que deben respetarse.

No hay que realizar nunca un masaje de reflexología podal

  • En un pie lesionado.
  • En caso de corte, equimosis, torcedura, esguince o fractura.
  • En caso de flebitis durante el tratamiento, de problemas venosos importantes o de gota.
  • En la mujer embarazada, después del tercer mes de embarazo.
  • En caso de enfermedad cardiovasculares.
  • Atrofia muscular de Südeck en el tobillo y pie.
  • Osteoporosis de pie /pierna.
  • Enfermedades de los pies: micosis-pie de atleta, callosidades, mal perforante plantar, intervenciones recientes.

Resultados de la reflexoterapia podal

ℹ No existe todavía acuerdo sobre la forma de actuación científica de la reflexoterapia podal o reflexología podal y de cómo un medio tan sencillo y de efectos secundarios casi nulos, posee unos efectos terapéuticos tan efectivos.

Actualmente para la interpretación de estos efectos se barajan cuatro hipótesis que podemos resumir así:

  • Hipótesis de la energía: Según la cual los bloqueos de energía provocados en ciertas zonas son yugulados por la reflexoterapia. Es decir, las presiones facilitan la circulación de la energía.
  • Hipótesis del ácido láctico: Según la cual los cristales de ácido láctico depositados en los pies son disueltos por la acción reflexoterapia. La circulación los envía al hígado para allí ser transformados.
  • Hipótesis de los receptores nerviosos: Según la cual por medio de las presiones en los pies se ponen en funcionamiento ciertos receptores nerviosos que envían impulsos analgésicos a todo el cuerpo.
  • Hipótesis relajante: Según la cual los efectos de las presiones en el pie provocan laxitud, relajación y distensión por vía refleja en conexión con todos los órganos y estructuras del organismo.

Conclusión sobre la reflexoterapia podal

La reflexoterapia podal es una técnica terapéutica que se basa en la estimulación de puntos específicos en los pies, los cuales se cree que están relacionados con diferentes partes y órganos del cuerpo. Se considera una forma de medicina alternativa y se utiliza para promover el equilibrio y el bienestar general.

Según la teoría de la reflexología, los pies son un mapa del cuerpo humano, y cada parte del pie se corresponde con una parte específica del organismo. Al aplicar presión en estos puntos, se estimula la energía en el cuerpo y se favorece la curación y el alivio de diversos síntomas y dolencias.

Durante una sesión de reflexoterapia podal, el terapeuta utiliza técnicas de masaje y presión en los pies, centrándose en áreas específicas según las necesidades individuales del paciente. Se cree que esta estimulación ayuda a mejorar la circulación sanguínea, alivia la tensión muscular, reduce el estrés y promueve un estado de relajación profunda.

La reflexoterapia podal se utiliza para tratar una amplia variedad de condiciones y síntomas, como dolores de cabeza, trastornos digestivos, problemas de sueño, estrés, ansiedad y tensión muscular, entre otros. Sin embargo, es importante tener en cuenta que esta técnica no sustituye el tratamiento médico convencional y se recomienda consultar a un profesional de la salud antes de comenzar cualquier terapia complementaria.

ℹ En resumen, la reflexoterapia podal es una técnica terapéutica que utiliza la estimulación de puntos específicos en los pies para promover el equilibrio y el bienestar general. Si estás interesado en probar esta terapia, te recomendamos buscar un terapeuta calificado y discutir tus necesidades y expectativas antes de comenzar el tratamiento.

Por tanto, la reflexoterapia podal o reflexología podal surge como una excelente manera de aliviar el estrés y las tensiones del día a día, ayudándonos a cuidar de nuestro cuerpo de una forma integral y holística.

Tanto si eres deportista en busca de mejorar tu rendimiento y acelerar tu recuperación, como si simplemente estás buscando una técnica efectiva para mejorar tu bienestar, la reflexoterapia podal puede ser el aliado que estás buscando.

Referencias bibliográficas

  1. Lamboley, D. (2007). Reflexoterapia podal. Editorial RBA.
  2. Vázquez Gallego, J. (2009). Manual profesional del masaje. Barcelona: Editorial Paidotribo.
  3. Sagrara Fernández, J. Quiromasaje técnica y sensibilidad. Barcelona: Metorox
  4. Anderson, KD. et al. (2021). Foot Reflexology: An Intervention for Pain and Nausea Among Inpatients With Cancer. Clin J Oncol Nurs, 25(5): 539-545
  5. Yaqui Huang, et al. (2020). Foot reflexology in the management of functional constipation: A systematic review and meta-analysis. Complment Ther Clin Pract, 40:101198.

Autor: Pablo Sánchez

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BIO: Profesor de Educación Física. Graduado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (UDC). Graduado en Educación Primaria, mención Educación Física (UEM). Máster en Profesorado de Educación Secundaria (UDC).

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