Enseñanza del deporte

En el presente artículo se van a exponer las características de la enseñanza del deporte desde una perspectiva global en sus etapas iniciales.

✎ Autor:  Brais Ruibal

Para tener una correcta conceptualización de la enseñanza del deporte desde una perspectiva global, en primer lugar, es preciso decir que el fenómeno de la práctica deportiva constituye algo que está en la vida de todos los individuos que forman parte de las sociedades avanzadas contemporáneas.

La práctica del deporte bien encauzada puede constituir un valioso elemento en la formación de las personas, que ofrece unas grandes posibilidades de realización personal. La práctica del deporte puede ser beneficiosa si se desarrolla sobre unas premisas adecuadas, en las que la enseñanza formal del deporte y el entrenamiento orientado hacia la alta competición juegan un importante papel (1).

Orientación de la práctica del deporte

La estructura de la práctica del deporte puede ser descrita mediante la tipificación del practicante deportivo en tres grandes categorías fundamentales:

  • El deporte para todos, con objetivos fundamentalmente vinculados a la recreación la ocupación del tiempo libre y la salud.
  • El deporte de base, que implica la participación en la competición deportiva reglada a niveles medios y bajos, con un propósito básico de rendimiento, pero con un claro contenido lúdico para la gran mayoría de los deportistas.
  • El deporte de alta competición, que comprende a las elites deportivas y al contingente de deportistas que participan en la misma y pugnan por acceder a dicho estatus.

La práctica del deporte bien encauzada puede constituir un valioso elemento en la  educación de las personas, esto se aplica todavía con más fuerza a la etapa inicial de la  práctica deportiva. En este sentido los componentes a potenciar en la práctica deportiva, para que ésta tenga un carácter formativo, pueden ser sintetizados en cuatro dimensiones:

  • Componente lúdico: el gusto por el juego es una característica típicamente humana, ya que el hombre nunca pierde el sentido de lo lúdico. A través de juego aprendemos a comprender mejor la realidad a adaptarnos al mundo adulto y a comunicarnos con los demás. La práctica deportiva brinda la posibilidad de dar un cauce adecuado a nuestras necesidades lúdicas, necesidades especialmente importantes en la infancia y la adolescencia.
  • Componente agonístico: una competitividad bien encauzada a través del comienzo de la práctica deportiva significa ante todo el desarrollo de la capacidad de superación del individuo y del fomento de actitudes de búsqueda de la excelencia.
  • Componente normativo: el aprendizaje de la importancia de las normas y las reglas para el buen funcionamiento social encuentra en el deporte un vehículo inestimable. La convivencia y el respeto a los demás, está fundamentado en el cumplimiento de unas normas sociales básicas. Las normas en el deporte, como en la vida, están para cumplirlas. En este sentido hay que puntualizar que para que el deporte sea educativo, el afán de ganar nunca debe de estar por encima del cumplimiento de las normas.
  • Componente simbólico: es posible que los anteriores componentes expuestos puedan ser integrados en el carácter simbólico del deporte. Es muy posible que sea este su mayor valor educativo, ya que a través del simbolismo de sus acciones el individuo puede aprender a afrontar la realidad en toda su crudeza, y a comprender el alcance de las confrontaciones humanas, liberando su energía y agresividad no en pugnas reales sino dentro del simbolismo propio del deporte.

Alumnos corriendo

Enfoques actuales de la enseñanza del deporte

Coexisten en la actualidad dos grandes tendencias sobre la práctica del deporte que se orientan hacia finalidades muy bien diferenciadas, como son:

  • La realización integral de la persona a través de los componentes educativo, recreativo y de desarrollo de la salud.
  • La promoción y el desarrollo del rendimiento deportivo de individuos y grupos en competición reglada.

Los planteamientos de la enseñanza del deporte con orientación educativa, recreativa y de desarrollo de la salud

En este enfoque, los propósitos del deporte están vinculados hacia la consecución de metas formativas, de mantenimiento y desarrollo de la salud, así como de esparcimiento y recreación, emergen para la enseñanza del deporte enfoques alternativos a los modelos convencionales.

Desde esta nueva idea, el individuo no tiene por qué verse sometido a un proceso de adaptación- selección en relación con exigencias externas, sino muy por el contrario a un proceso de acercamiento a sus demandas y necesidades, dentro del que se contempla la inclusión de todos los individuos.

La enseñanza del deporte según esta perspectiva, lleva consigo, entre otras cosas, una adecuación de las condiciones, normas, reglamentos propios de cada actividad deportiva, de forma que su práctica sea accesible a la persona, niño joven o adulto que a ella se aproxime. La frase que podría resumir la filosofía de este enfoque de la enseñanza deportiva podría ser “el deporte al servicio de la persona”.

La orientación educativa, recreativa y hacia la salud de la enseñanza del deporte puede verse asimismo contemplada desde diferentes perspectivas, de forma que desde este punto de vista se han producido una serie de propuestas que representan modelos de enseñanza con una cierta identidad propia, aunque asimismo se puede detectar entre ellos una cierta superposición.

Rendimiento escolar

Los planteamientos de la enseñanza del deporte con orientación hacia el rendimiento deportivo

Cuando explícitamente la práctica del deporte se orienta hacia el rendimiento deportivo, esto lleva consigo, por parte del individuo, someterse a complejos procesos de adaptación, en relación con los factores que condicionan dicho rendimiento. Esta circunstancia constituye la esencia de la preparación para la competición en cada modalidad deportiva.

En consecuencia, el éxito depende en gran medida de la capacidad de adaptación que posea el individuo y de la perseverancia en el esfuerzo que este proceso demanda, lo que significa mucha motivación por su parte.

Es evidente que los triunfos en la alta competición no están al alcance de todos los individuos, por lo que nunca debe someterse al esfuerzo que esto acarrea a una población de sujetos normalmente heterogénea, de forma indiscriminada. No es de extrañar que cuando la enseñanza del deporte se hace de esta forma constituya un objeto de crítica fundamentada por parte de las personas con sensibilidad educativa.

Antes de emprender la carrera deportiva se debe siempre disponer de la información necesaria, para así poder reflexionar adecuadamente sobre las posibilidades de éxito, los pros y contras que conlleva la preparación para el alto rendimiento deportivo, y tomar una decisión al respecto de manera consciente. La exigencia que se plantea en el entrenamiento para estos fines es muy grande, y los procesos de enseñanza- aprendizaje asociados a la adquisición de las técnicas deportivas deben de producirse con gran precisión.

Los modelos de enseñanza que se aplican en el ámbito del deporte de alto rendimiento tienen un carácter sistémico y son bastante complejos ya que engloban muchos factores que se interrelacionan en una serie de procesos que se producen de forma paralela.

Bibliografía

  1. Sánchez Bañuelos, F. (2013): Modelos de enseñanza orientados al alto rendimiento deportivo. Máster en Alto Rendimiento Deportivo. Comité Olímpico Español. Universidad Autónoma de Madrid. Centro Olímpico de Estudios Superiores. Material no publicado.