En este artículo abordaremos el que es sin duda el tema Tabú por excelencia en el mundo del deporte: los anabolizantes.
De una manera muy sintetizada se expondrá una introducción en la que se hablará de la testosterona, desde un plano fisiológico.
Ya que de dicha molécula y de sus variaciones químicas, como la dihidrotestosterona y la nortestosterona, se sintetizan todos los anabolizantes utilizados por los deportistas de élite y gente relacionada con la actividad física con sobrecargas.
También se enumerarán los beneficios que conlleva el consumo de estas sustancias sintéticas y sus posibles efectos secundarios tanto a corto como a largo plazo. Por último, se incluirá un apartado sobre el dopaje y reglas anti-doping.
¿Qué son los anabolizantes?
Los anabolizantes son derivados químicos sintetizados a partir de la testosterona.
La testosterona, a su vez, es una hormona sintetizada en el cuerpo a partir del colesterol, es decir, comparten su misma estructura química, son un ciclopentanoperhidrofenantreno (3 ciclohexanos y 1 ciclopentano) (1).
La testosterona en el cuerpo humano
La testosterona se biosintetiza en los testículos, concretamente en las células de Leydig, son las encargadas de producir el 90% de la testosterona total secretada en un día (4-10mg en hombres) y el 10% restante es producida por el córtex adrenérgico (0,5mg aprox. en hombres y mujeres) (2).
Sólo un 2% de la testosterona se encuentra en forma libre en la sangre, el 53-55% está unida débilmente a la albúmina sérica y del 43-45% se encuentra fuertemente unida a la globulina enlazante de la testosterona-estradiol (TeBG) (2)(3).
Esta producción está controlada por el eje Hipotálamo-Hipofisario-Testicular (H-H-T), el hipotálamo produce y secreta Hormona Liberadora de Gonadotropinas (GnRH).
Ésta va a estimular a la adenohipófisis para que produzca gonadotropinas, la Hormona Folículoestimulante (FSH) y la Hormona Luteinizante (LH).
Ésta última es la encargada de estimular a las células de Leydig de los testículos para que produzcan testosterona (4)(5).
Cuando esta hormona pasa por algunos tejidos como la piel y la próstata es reducida por la enzima 5α-reductasa a dihidrotestosterona y ésta junto a su receptor androgénico es la responsable de los efectos androgénicos: crecimiento del vello corporal y facial, el acné o la calvicie androgénica y el crecimiento de la próstata en hombres maduros.
Por otra parte la testosterona puede ser oxidada por la enzima aromatasa y convertirse en estradiol, principal hormona femenina, que en concentraciones elevadas en el hombre puede ocasionar una serie de efectos secundarios que analizaremos más adelante (Figura 1)(2).
Acción de la testosterona y sus derivados
La testosterona cuando se une a su complejo androgénico es la encargada de producir los llamados efectos anabolizantes, como son: mantenimiento de la libido, producción de esperma, incremento de la masa muscular y fuerza, y densidad mineral en los huesos.
A su vez la testosterona y sus derivados se pueden clasificar en dos grupos.
Grupo 1: los que tienen mayor afinidad con el receptor androgénico, son los que actúan directamente sobre el tejido muscular, incrementando la síntesis proteica en las células musculares.
Grupo 2: los que tienen poca afinidad por dicho receptor actuando de manera indirecta sobre el tejido muscular estimulando la liberación de hormonas anabólicas, como la GH y factores de crecimiento similares a la insulina (2) (3).
Tipos de anabolizantes
Los anabolizantes más comunes que actualmente se comercializan vienen presentados principalmente de dos formatos para su administración: vía oral o vía parenteral (inyectable).
La mayoría de AAE orales son 17α alquilados, es decir, se le añade un radicar alquilo en el Carbono 17 en posición α para evitar el efecto inhibitorio del primer paso hepático y de esa forma pasar al torrente sanguíneo sin ser metabolizado por el hígado.
Dicha modificación vuelve a la molécula muy hepatotóxica por ello su consumo debe ser el estrictamente necesario.
En cuanto a los AAE inyectables pueden presentarse en disoluciones acuosas, en forma de suspensiones, y en disoluciones acuosas.
Decir que son menos tóxicos para el hígado ya que pasan directamente al torrente sanguíneo pero aún así deben pasar por él para ser eliminados del organismo, por ello la toxicidad en éstos sigue estando presente.
Los más comunes son los ésteres de testosterona y derivados de la misma (Tabla 1) (2).
Visión actual del consumo de anabolizantes
Perfiles básicos de consumidores de anabolizantes
Las personas que consumen los esteroides anabólicos por norma general y según diferentes estudios sociológicos son (6):
- Deportistas de alto rendimiento implicados en competiciones de gran importancia.
- Usuarios de gimnasio
- Profesionales como miembros de cuerpos especiales de seguridad tanto pública como privada.
Administración de esteroides anabólicos o anabolizantes
Para administrar los anabolizantes en el cuerpo humano existen dos tipos de vía: la oral y la intramuscular; aunque también existe otra vía mucho menos extendida, la transcutánea.
- Vía oral: es mediante la cual se ingieren estas sustancias a partir de medicamentos en forma de cápsulas o pastillas, siendo un método no invasivo. Estos solo pueden obtenerse legalmente mediante la presentación de una receta médica en las farmacias.
- Vía intramuscular: es mediante la cual los esteroides anabólicos se inyectan directamente en el músculo, siendo un método invasivo.
Entre estos dos tipos de consumo hay diferencias sustanciales en cuanto a la velocidad de actuación en músculos y metabolismo relacionado con el rendimiento.
Por un lado, hay que decir que las inyecciones intramusculares tienen un efecto mucho más rápido y duradero que la toma oral de cápsulas o pastillas, las cuales deben tomarse con antelación para que el efecto de los esteroides anabólicos aparezca.
Ciclos y técnicas de consumo de anabolizantes
Ante la pregunta que puede surgir a la vista del uso de los anabolizantes, hay que decir que la planificación en cuanto a su administración se hace a través de los llamados “Ciclos”.
Estos son planes que determinan el tipo de vía para administrarlos, como antes se ha indicado: oralmente o intramuscularmente; las cargas, las cuales son extremadamente altas en comparación a las que pueden recomendarse por médicos a personas que los necesiten (6).
El objetivo que buscan, que suele ser el aumento de masa muscular, fuerza máxima o mejorar el rendimiento; e incluso, para cual género son más beneficiosos.
El tiempo en el cual pueden ser llevados a cabo es dispar, ya que algunos pueden durar solamente semanas para conseguir el objetivo deseado en una competición cercana o pueden llevarse a cabo durante un gran número de meses, llegando en algunos casos a los 18.
Dentro del mercado ilegal de estos productos, algunos de los ciclos que existen son (7):
- Diamante
- Mini-ciclo
- Pre-competitivo
- Femenino
Dentro de estos ciclos aparecen diferentes técnicas mediante las cuales poder administrar los esteroides anabólicos y algunas son (8):
- Tapering: consiste en disminuir las cargas anabólicas gradualmente para evitar que la ausencia brusca de los esteroides anabólicos no inhiba la función de la glándula endocrina que sintetiza y secreta dicha sustancia (8).
- Stacking: consiste en consumir diversos esteroides anabólicos a la vez, con el propósito de acumular los efectos de cada uno (8).
Proceso fisiológico de los anabolizantes
Los anabolizantes son sustancias que se encuentran en el propio cuerpo humano. Son hormonas sintetizadas por los órganos que componen el sistema endocrino como pueden ser las gónadas, siendo por ejemplo la testosterona un tipo de anabolizantes.
Al relacionar a este tipo de compuestos con el ejercicio físico, cabe señalar como anteriormente se ha dicho que son utilizados para obtener mejoras sustancialmente rápidas en cuanto a estructura corporal y rendimiento deportivo.
Aunque estos se administren por vial oral o inyectándolos intramuscularmente, su actuación sobre el organismo es la misma que las hormonas sintetizas y secretadas por el mismo cuerpo humano.
A continuación, se explica el proceso seguido por aquellos anabolizantes incorporados al organismo que afectan al tejido muscular provocando su crecimiento.
Estos compuestos si son introducidos por vía oral, primeramente, deberán ser digeridos por el estómago para que sea en el intestino delgado donde se absorban y así, pasar al torrente sanguíneo y llegar al tejido muscular.
O si son inyectados pasarán intramuscularmente. Una vez en los músculos, los anabolizantes son captados por sus receptores específicos en las membranas celulares o en el núcleo.
De esta forma, se crea el complejo hormona-receptor que se unirá al ADN celular, activando genes específicos.
De ahí, se creará una copia, el ARNm, que saldrá del núcleo de la fibra muscular al sarcoplasma donde será captada por el retículo endoplasmático rugoso.
En este orgánulo el ARNm será traducido y dará lugar a la síntesis de las proteínas estructurales de las fibras musculares, provocando el aumento de las mismas.
Efectos de los anabolizantes producidos en la vida deportiva y diaria del atleta/deportista que los consume
Como ya hemos dicho, los consumidores de estas sustancias son principalmente los deportistas de alta competición y los usuarios de gimnasio, tratando de obtener un incremento del rendimiento deportivo o una mayor estética o mejora del aspecto físico.
Pero, ¿qué efectos producen los EAAs para conseguir ambos objetivos? ¿Cómo influye la consumición de anabolizantes en la vida del deportista? ¿Existen realmente graves efectos secundarios?
Beneficios del uso de anabolizantes
Los beneficios perseguidos con su consumo son fundamentalmente mejoras en la composición corporal (reducción de grasas y aumento de la masa muscular magra), e incrementos en la fuerza y la potencia.
Además, algunos deportistas manifiestan que los EAAs incrementan la motivación y reducen la fatiga durante el entrenamiento a la vez que acortan los períodos de recuperación tras las cargas de trabajo (9).
De un modo esquemático, el efecto general es el resultado de la integración de tres acciones (6):
- Incremento en la retención de nitrógeno, generando un equilibrio de nitrógeno positivo y dando lugar a una mejor utilización de la ingesta de proteínas (dieta).
- Estímulo del sistema ARN-polimerasa, mediante la combinación entre el receptor androgénico y el EAA, dando lugar a un incremento de la síntesis proteica que derivaría en un aumento de la masa muscular contribuyendo al desarrollo de capacidades físicas condicionales como la fuerza, la velocidad y la potencia. Además también aumenta la eritropoyetina.
- Inhibición competitiva parcial con los receptores de glucocorticoides, por lo que actuaría como mecanismo anticatabólico ya que existe una mayor utilización de nitrógeno que de proteínas, derivando en una menor pérdida de masa muscular.
Por otra parte, casi todos los estudios han fallado en demostrar efectos benéficos de los anabolizantes sobre el VO2máx (10).
Otro estudio realizado con un grupo de hombres que tomaron testosterona pero no realizaron ejercicio demostró un aumento en el tamaño muscular de sus brazos y piernas (tríceps y cuadríceps) y un aumento de la fuerza en press de banca (9 ± 4 vs -1 ± 1 kg, p <0,05) y en ejercicios de sentadilla (16 ± 4 vs 3 ± 1 kg, P <0,05) respecto al grupo placebo.
Por su parte, el grupo que tomó testosterona y realizó ejercicio obtuvo mejores resultados tanto en incremento del tamaño muscular como en fuerza desarrollada en press banca y sentadilla respecto a los demás grupos. (11).
Por tanto, las modalidades deportivas mayormente implicadas en el empleo de estas sustancias son aquellas en las que se precisa un alto grado de fuerza, velocidad y potencia (halterofilia, lanzamientos, fútbol americano, baloncesto, velocistas…etc.) (12).
Efectos secundarios del uso de anabolizantes
Como ya sabemos, los anabolizantes son andrógenos sintéticos derivados de la testosterona, denominados así por ejercer en el organismo acciones o efectos androgénicos (masculinizantes) y anabolizantes (construcción o aumento de los tejidos) imposibles de disociar (13).
De estas dos acciones derivan sus efectos secundarios.
Cabe destacar que debido a que los efectos de estas hormonas no suelen tener lugar de manera inmediata y al desconocimiento de quienes utilizan este tipo de sustancias, resulta complejo establecer cifras y datos cuantificables con rigor.
Además no se pueden realizar estudios con personas que consuman anabolizantes y ver sus efectos a los 20 años y las enfermedades o muertes causadas en consumidores de EAAs no pueden ser probadas mediante una relación causa-efecto.
Por tanto, se establece que los pocos trabajos que demuestran los efectos secundarios del abuso de EAA a largo plazo indican que las consecuencias de la consumición de este tipo de sustancias se reflejan en prácticamente todos los aparatos o sistemas del organismo (13) (7):
Los efectos positivos y negativos dependerán del tipo y especificidad de la droga, la dosis, la vía, la frecuencia, la forma y el tiempo total de la administración, la edad, el género, la dieta, el entrenamiento, la herencia, la experiencia en la actividad y la situación físico-psíquica del atleta, siendo su acción diferente en cada individuo (7).
Anabolizantes y dopaje
En 1964 en los JJOO de Tokio, estaba tan extendido su consumo que se convirtieron en un serio problema. Numerosos entrenadores y atletas, establecieron sus propias formas de suministro al margen de cualquier control médico o fundamento.
Finalmente, en 1968, el COI redacta una definición de doping y en 1976 en los JJOO de Montreal su utilización queda prohibida (14).
La definición redactada por el COI en 1968 cita así (Definición del COI – Antes de la fundación WADA) (15):
“El Doping es definido como la presencia en el cuerpo humano de sustancias prohibidas de acuerdo con la lista publicada por el Comité Olímpico Internacional y/o la Organización Internacional del miembro de la Organización en cuestión.
El uso de tales sustancias, su presencia en muestras de orina o sangre y el uso de métodos con el propósito de alterar los resultados de un análisis de orina o sangre, está prohibido.”
La definición oficial actual de dopaje, basada en el Código Mundial Anti-dopaje, es como sigue (16):
“El Doping es definido como el acontecimiento de una o más violaciones de las reglas anti-doping establecidas en el artículo 2.1 hasta el 2.8 del Código Mundial Anti-dopaje.”
Dichos artículos son:
2.1 La presencia de una sustancia prohibida o de sus metabolitos o marcadores en la muestra de un deportista.
2.2 Uso o intento de uso por parte de un deportista de una sustancia prohibida o de un método prohibido.
2.3 La negativa o resistencia, sin justificación válida, a una recogida de muestras tras una notificación hecha conforme a las normas antidopaje aplicables, o evitar de cualquier otra forma la recogida de muestras.
2.4 Vulneración de los requisitos sobre la disponibilidad del deportista para la realización de controles fuera de competición.
2.5 Falsificación o intento de falsificación de cualquier parte del procedimiento de control del dopaje.
2.6 Posesión de sustancias o métodos prohibidos.
2.7 Tráfico o intento de tráfico de cualquier sustancia prohibida o método prohibido.
Administración de anabolizantes durante la competición
Según el BOE Ley 24/02/04 punto 5º cita: “Para la Testosterona, específicamente se establece como rango de referencia un valor de 4 para el cociente entre su concentración y la de Epitestosterona en la muestra urinaria” (17).
La Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte (AEPSAD), ha creado un “banner” denominado “Sanciona2” en el cual se muestran los diferentes deportistas, sus modalidades deportivas y sus respectivas sanciones.
Conclusión sobre los anabolizantes
En vistas del trabajo realizado, pensamos que el campo de los anabolizantes esteroideos es muy amplio dentro de la relación que tiene con la Fisiología del Ejercicio.
Por otro lado, al igual que otras conclusiones de los artículos de investigación que hemos utilizado para realizar este artículo, cuestionamos y rechazamos el consumo de anabolizantes a pesar de los resultados que en cuanto al rendimiento se desprenden de su utilización.
Opinamos esto porque los efectos secundarios que les atribuyen son altamente perjudiciales para los individuos que se administran estos productos, pudiendo provocar no solo problemas corporales, fisiológicos y metabólicos, sino que también puede afectarles en ámbitos sociales, sentimentales o laborales.
Por lo tanto, creemos que la lucha contra los anabolizantes esteroideos y cualquier otro tipo de sustancias dopantes es muy importante para concienciar a la gente de que su consumo puede traer unos cuantos “efectos positivos”.
Además a corto, medio y largo tiempo conllevan problemas de salud física muy graves.
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- Ley Orgánica 02/2004, de 24 de febrero, por la que se aprueba la lista de sustancias y grupos farmacológicos prohibidos y de métodos no reglamentarios de dopaje en el deporte. Boletín Oficial del Estado, 24 de febrero de 2004, pp.8591-8596.
Mi hermano estuvo consumiendo anabolizantes inyectables durante 24 meses. El día 8 de abril del 2022 se quitó la vida…😓😭