En este artículo conoceremos qué son los aditivos alimentarios, en concreto, los carotenos y el glutamato monosódico, así como las ventajas y desventajas de sus usos culinarios.
¿Qué son los aditivos alimentarios?
Son sustancias que se añaden a los alimentos durante el proceso de fabricación, transporte o almacenamiento con un fin tecnológico.
Es decir, este fin tecnológico tiene como objetivo mejorar la textura o sabor de un alimentos, mejorar sus características organolépticas, hacerlo más resistente a la proliferación de microorganismos, etc. (1)
Según sus propiedades podemos distinguir 27 clases de aditivos, y todos ellos deben de haber sido autorizados por la Unión Europea.
La autorización del uso de los aditivos alimentarios en la Unión Europea viene recogida en el «Reglamento (UE) No 1129/2011 de la Comisión de 11 de noviembre de 2011 por el que se modifica el anexo II del Reglamento (CE) no 1333/2008 del Parlamento Europeo y del Consejo para establecer una lista de aditivos alimentarios de la Unión».
Los aditivos alimentarios se dividen en las siguientes categorías: (1)
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¿Cuáles son las condiciones para que se pueda usar un aditivo alimentario?
Para que se pueda autorizar el uso de un aditivo alimentario se deben de dar 3 condiciones específicas: (2)
- Cuando haya una necesidad tecnológica suficientemente evidente y cuyo objetivo no sea posible conseguirlo utilizando otros métodos económicos o tecnológicos.
- En el caso de que no suponga ningún peligro para la salud de los consumidores en las dosis que se hayan propuesto, siempre y cuando haya datos con evidencias científicas.
- Cuando no incite a error a los consumidores.
El número E
El Comité del Codex sobre Aditivos Alimentarios y Contaminantes de los Alimentos (CCFAC) ha elaborado un sistema numérico para los aditivos enumerados mediante el Sistema Internacional de Numeración de Aditivos Alimentarios (SIN), cuya numeración se conoce como «Clasificación Número E». (2)
En la Norma General del Códex sobre la nomenclatura de los aditivos alimentarios se establece que los números de identificación deben utilizarse solo junto con nombres genéricos que tengan lógica para los consumidores, es decir, que describan las funciones concretas de esos aditivos alimentarios.
No obstante, en las etiquetas de los alimentos está permitido tanto que los aditivos alimentarios aparezcan por su nombre o por el número E que le corresponde en función de sus propiedades. (2)
¿Cómo debe de aparecer el número E en las etiquetas de los alimentos? (2)
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E160: Carotenos
Los carotenos también son conocidos por el nombre de Carotenoides, Naranja 5, Caroteno Vegetal, Cl Food Orange 5.
Su color suele ser naranja o amarillo y nuestro cuerpo tiene la capacidad de transformar estas sustancias en Vitamina A, imprescindible para la visión, crecimiento, división celular, la reproducción e inmunidad. (3)
Podemos dividir los carotenos en 6 categorías:
- Beta carotenos (E160a)
- Extractos de Annato (E160b)
- Extracto de Pimentón, Capsantina y Capsorrubina (E160c)
- Licopeno (E160d)
- Beta Apocarotenal (E160e)
- Éster etílico del Ácido Beta Apocarotenoico (E160f)
Los carotenos se suelen utilizar bastante en la tecnología de elaboración de una gran variedad de productos alimenticios en el mercado: refrescos de limón, de naranja, en batidos, jugos, mantequillas, mayonesas, dulces, cereales de desayuno, zumos, comida precocinada y embutidos.
Otros usos no culinarios: pastillas y cremas bronceadoras.
E621: Glutamato monosódico
El glutamato monosódico es un potenciador del sabor semisintético, el cual ha sido clasificado como seguro por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). (4)
Este aditivo de obtiene de la sal sódica del Ácido Glutámico ,como resultado de la fermentación de azúcares residuales vegetales y animales, por acción bacteriana.
Además, no se encuentra clasificado dentro de los típicos sabores a dulce, salado, ácido o amargo, por lo que se conoce como gusto a «umami», el quinto sabor, por su origen japonés, ya que el término significa salado. (5)
No obstante, actualmente se cuestiona su uso abusivo en los alimentos, ya que la FDA ha recibido una gran cantidad de informes acerca de las consecuencias que han tenido en los consumidores. (5)
Algunas de las reacciones que han experimentado los consumidores por el consumo de alimentos con glutamato sódico han sido las siguientes, conocidas como el «Síndrome del Restaurante Chino»:
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Aunque han aparecidos estos síntomas en algunos consumidores por glutamato monosódico, los investigadores reconocen que pueden aparecer síntomas a corto plazo, pero que no hay pruebas evidentes de una estrecha relación entre el glutamato monosódico y la aparición de estas reacciones.
¿Por qué se utiliza el glutamato monosódico como aditivo en los alimentos?
Parece ser que, tal y como se ha comentado, el glutamato monosódico se usa habitualmente en alimentos que no se consideran muy saludables o que son ultraprocesados.
Este motivo es uno de los cuales por los que se aconseja consumir alimentos más saludables, frescos y evitar los productos industrialmente procesados, ya que aunque este ingrediente no ocasionaría graves consecuencias en cantidades mínimas, podrían aparecer si se hace un uso abusivo de este.
A pesar de las posibles reacciones, tal y como se ha nombrado al principio de este punto, la FDA considera el glutamato monosódico se seguro y sin riesgos para la salud humana. No obstante, cabe recordar que si se administra en grandes cantidades directamente a la sangre podría ocasionar daños.
Ventajas del uso de glutamato monosódico
Hay que mencionar que el glutamato monosódico no tiene solo desventajas por un uso abusivo de este, sino que si es considerado como seguro por la FDA, la OMS y la FAO es porque se han comprobado los beneficios que presenta en nuestro organismo y en otros alimentos. Algunas de las ventajas más destacadas por los expertos son: (6)
- Tanto la OMS como la FAO lo clasifican en la categoría más segura, junto a la sal y el bicarbonato.
- Favorece la síntesis de glutatión, antioxidante importante para el organismo.
- Al usarlo como aditivo en los alimentos, potencia el sabor de estos.
- Evita un exceso de consumo de sal.
Aspartamo
El propósito de este artículo no es otro que aclarar la relación existente entre el aspartamo y el cáncer tras la polémica generada en las últimas semanas en torno a la seguridad del consumo de este edulcorante, después de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo haya declarado como potencialmente cancerígeno.
¿Qué es el aspartamo y donde se encuentra?
El aspartamo pertenece al grupo de los conocidos como edulcorantes artificiales, un conjunto de sustancias químicas que producen un intenso sabor dulce sin aporte de energía (sucralosa, eritritol, etc. ) y en concentraciones mucho más bajas que sus homólogos calóricos (sacarosa, fructosa, etc) (2).
El aspartamo se forma mediante la unión de dos aminoácidos como son el ácido aspártico y fenilalanina. Se estima que produce un sabor 200 veces más dulce que el azúcar blanco común y fue aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) en los años 70 (6).
El aspartamo está presente en multitud de productos alimentarios, especialmente en los que no llevan azúcares añadidos como refrescos light, productos dietéticos, chicles sin azúcar, galletas, edulcorantes acalóricos, etc.
También se encuentra en productos no comestibles como medicamentos, pasta de dientes o enjuagues bucales. En la etiqueta del producto, podemos identificarlo en la lista de ingredientes con el código E- 951 (7).
Aunque su nombre pueda sonar químico y extraño, realmente es una combinación de dos aminoácidos naturales: fenilalanina y ácido aspártico.
¿Es seguro el consumo de este edulcorante?
El aspartamo es uno de los edulcorantes más estudiados a lo largo de la historia, no obstante siempre ha estado inmerso en una gran polémica y son varios los mitos existentes entorno a su seguridad y los posibles efectos negativos que podría tener para la salud.
Dada la gran polémica generada por los edulcorantes artificiales en general y el aspartamo en particular, esta entidad ha llevado a cabo diversas investigaciones para reevaluar la seguridad de este edulcorante.
En 2009, un grupo de expertos de esta entidad volvió a examinar la seguridad de este suplemento ante la idea emergente de que se trataba de una sustancia potencialmente cancerígena. Para ello, realizaron un estudio en modelos animales y concluyeron que no existía relación entre el consumo de este edulcorante y el cáncer.
En 2013 la EFSA, volvió a publicar otra revisión de la seguridad del aspartamo y sus productos de degradación y sus expertos concluyeron que tanto este edulcorante como los subproductos de su degradación son seguros para la población general y que la ingesta diaria admisible (IDA) de 40 mg/kg de peso/dia no entraña ningún riesgo para el consumidor, que en términos generales realiza un consumo muy por debajo de esta cantidad.
Por otro lado, una revisión muy reciente de Borghoff et al. (2023) evaluó la evidencia científica disponible sobre la relación entre el aspartamo y el cáncer en humanos y animales.
Los autores recopilaron datos de diversos estudios epidemiológicos sobre la relación entre el consumo de aspartamo y el cáncer y concluyeron que no existe evidencia suficiente para demostrar que el consumo de aspartamo se relacione de forma significativa con el cáncer en ni en animales ni en humanos.
Polémica actual sobre el aspartamo
En las últimas semanas, ha vuelto a surgir una gran polémica en torno a este edulcorante cuando saltó a los medios la noticia de que la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), un organismo perteneciente a la OMS, estaba contemplando la posibilidad de declarar al aspartamo como posible agente cancerígeno.
La nueva polémica parece haber surgido a raíz de una investigación reciente de Debras et al (2022). Los investigadores analizaron la ingesta dietética y el consumo de edulcorantes (aspartamo y acesulfamo-k) de un total de 102 865 adultos a lo largo de más de 7 años, utilizando diarios dietéticos y diferentes tests validados.
Los autores concluyeron que los individuos que consumían ambos edulcorantes tenían más riesgo de desarrollar cáncer que aquellos que no los ingerían.
La Popularidad del Aspartamo
Debido a su sabor dulce y sus pocas calorías, el aspartamo ha ganado popularidad entre quienes buscan reducir su consumo de azúcar. Pero ¿es realmente tan bueno como parece? Veamos lo que dicen los expertos.
ℹ El aspartamo puede ayudarte a reducir tu consumo de azúcar sin renunciar al dulzor.
⚠ |
Pros |
Contras |
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1 | Bajas calorías | Puede tener efectos secundarios |
2 | Sabor similar al azúcar | Controversia sobre su seguridad |
3 | Apto para diabéticos | No apto para personas con fenilcetonuria |
ℹ El aspartamo tiene un sabor muy similar al del azúcar pero con menos calorías.
Impacto en la Salud del Aspartamo
Pero entonces, si el aspartamo tiene todas estas ventajas… ¿Por qué hay tanta controversia alrededor de él? Existen estudios contradictorios acerca de los posibles efectos adversos del aspartamo sobre la salud. Algunas investigaciones señalan posibles riesgos mientras que otras concluyen que su consumo moderado no presenta peligros significativos.
“La evidencia científica disponible sugiere que el consumo moderado de aspartamo es seguro para la mayoría de las personas.”
Únicamente aquellos individuos con una rara enfermedad genética llamada fenilcetonuria (PKU), deben evitar completamente este edulcorante ya que no pueden metabolizar uno de sus componentes, la fenilalanina.
Alternativas al Aspartamo
Si prefieres evitar el uso de edulcorantes artificiales como el asptarmo existen numerosas alternativas naturales. Aquí te mencionamos algunas:
- Estevia
- Eritritol
- Miel cruda
- Jarabe de arce
Cada una tiene sus propias características y beneficios potenciales para la salud, así como diferentes niveles de dulzura y contenido calórico.
Componente |
Índice Glucémico |
---|---|
Estevia | 0 |
Eritritol | 0 |
Miel cruda | 58-61 |
Jarabe de arce | 54 |
Conclusiones
A la luz de estos resultados, parece bastante obvio que el aspartamo es perjudicial para la salud y que debería prohibirse su uso, ¿no?. No obstante, si nos paramos a analizar detenidamente el trabajo de Debras y colegas, podemos ver que se trata de un estudio observacional.
Los estudios observacionales pueden mostrar asociación entre dos eventos, pero esta asociación no tiene por qué implicar causalidad.
Otra de estas leyes, llamada gradiente biológico, establece que para considerar a un elemento como factor de riesgo de una enfermedad, a mayor exposición a dicho factor, más probabilidad de desarrollar dicha enfermedad.
En el estudio mencionado, los individuos que consumían cantidades menores de aspartamo mostraban mayor riesgo de desarrollar la enfermedad que aquellos que consumían cantidades más elevadas.
Si acudimos a un adulto de 60 kg de peso corporal como ejemplo, este tendría que consumir más de 30 latas de refresco al día para alcanzar dicha ingesta (ASC, s.f).
Referencias bibliográficas
- Aguilar, Fernando & Charrondiere, Ute & Dusemund, B. & Galtier, P. & Gilbert, J. & Gott, David & Grilli, S. & Guertler, R. & Kass, George E. N. & Koenig, Juergen & Mortensen, Alicja & Parent Massin, Dominique. (2009). Updated opinion on a request from the European Commission related to the 2 nd ERF carcinogenicity study on aspartame, taking into consideration study data submitted by the Ramazzini Foundation in February 2009 1 Scientific Opinion of the Panel on Food Additives and Nutrient Sources added to Food. Eur Food Safety Authority J. 1015.
- Ahmad, S. Y., Friel, J., & Mackay, D. (2020). The Effects of Non-Nutritive Artificial Sweeteners, Aspartame and Sucralose, on the Gut Microbiome in Healthy Adults: Secondary Outcomes of a Randomized Double-Blinded Crossover Clinical Trial. Nutrients, 12(11), 3408.
American Cancer Society. (s. f.). Aspartame. Recuperado de https://www.cancer.org/cancer/risk-prevention/chemicals/aspartame.html
Borghoff, S. J., Cohen, S. S., Jiang, X., Lea, I. A., Klaren, W. D., Chappell, G. A., Britt, J. K., Rivera, B. N., Choski, N. Y., & Wikoff, D. S. (2023). Updated systematic assessment of human, animal and mechanistic evidence demonstrates lack of human carcinogenicity with consumption of aspartame. Food and chemical toxicology : an international journal published for the British Industrial Biological Research Association, 172, 113549. https://doi.org/10.1016/j.fct.2022.113549 - Debras, C., Chazelas, E., Srour, B., Druesne-Pecollo, N., Esseddik, Y., Szabo de Edelenyi, F., Agaësse, C., De Sa, A., Lutchia, R., Gigandet, S., Huybrechts, I., Julia, C., Kesse-Guyot, E., Allès, B., Andreeva, V. A., Galan, P., Hercberg, S., Deschasaux-Tanguy, M., & Touvier, M. (2022). Artificial sweeteners and cancer risk: Results from the NutriNet-Santé population-based cohort study. PLoS medicine, 19(3), e1003950.
- EFSA ANS Panel (EFSA Panel on Food Additives and Nutrient Sources added to Food), 2013. Scientific Opinion on the re-evaluation of aspartame (E 951) as a food additive. EFSA Journal 2013; 11( 12):3496, 263 pp. doi:10.2903/j.efsa.2013.3496
- EFSA Panel on Food Additives, Flavourings, Processing Aids and Materials in Contact with Food, 2006. Opinion of the Scientific Panel on food additives, flavourings, processing aids and materials in contact with food (AFC) related to a new long-term carcinogenicity study on aspartame. EFSA Journal 2006; 4( 5):356, 44 pp.
- Sathyapalan, T., Thatcher, N. J., Hammersley, R., Rigby, A. S., Courts, F. L., Pechlivanis, A., Gooderham, N. J., Holmes, E., le Roux, C. W., & Atkin, S. L. (2015). Aspartame sensitivity? A double blind randomised crossover study. PloS one, 10(3), e0116212.
- Soffritti, M., Padovani, M., Tibaldi, E., Falcioni, L., Manservisi, F., & Belpoggi, F. (2014). The carcinogenic effects of aspartame: The urgent need for regulatory re-evaluation. American journal of industrial medicine, 57(4), 383–397.
¿Cómo evitar consumir aditivos alimentarios?
Para evitar consumir aditivos alimentarios, es importante tener una dieta equilibrada que incluya alimentos frescos y naturales en lugar de alimentos procesados y envasados. Aquí hay algunas recomendaciones:
- Compra alimentos frescos en lugar de alimentos procesados: Los alimentos frescos, como frutas, verduras, carnes y pescados, son una excelente opción para evitar los aditivos alimentarios. Además, también son ricos en nutrientes esenciales.
- Lea las etiquetas de los alimentos: Si compra alimentos procesados, asegúrese de leer las etiquetas con cuidado y buscar aquellos que tengan la menor cantidad de aditivos posible. Trate de evitar alimentos que contengan conservantes, colorantes, saborizantes artificiales y otros aditivos.
- Cocina en casa: Cocinar en casa con ingredientes frescos y naturales es una excelente manera de evitar los aditivos alimentarios. De esta manera, puede controlar los ingredientes y asegurarse de que su comida sea saludable y nutritiva.
- Evita los alimentos procesados: Los alimentos procesados, como las comidas rápidas, los snacks, las bebidas azucaradas y los postres, son ricos en aditivos alimentarios. Trate de limitar su consumo y elija opciones más saludables en su lugar.
- Elije alimentos orgánicos: Los alimentos orgánicos se cultivan sin el uso de pesticidas, herbicidas y fertilizantes químicos, lo que significa que son menos propensos a contener aditivos alimentarios.
Siguiendo estos consejos, puede reducir su consumo de aditivos alimentarios y mantener una dieta saludable y equilibrada.
¿Cuántos aditivos alimentarios existen?
Existen muchos tipos de aditivos alimentarios, y la cantidad exacta varía según la fuente que se consulte.
En general, se estima que hay varios miles de aditivos alimentarios diferentes, cada uno con una función específica en los alimentos procesados.
Los aditivos alimentarios se clasifican en diferentes categorías según su función, incluyendo conservantes, antioxidantes, colorantes, saborizantes, edulcorantes, emulsionantes, estabilizadores y agentes espesantes, entre otros.
Cada categoría puede contener varios tipos diferentes de aditivos.
Es importante tener en cuenta que aunque algunos aditivos alimentarios son seguros y están aprobados para su uso por los organismos reguladores de seguridad alimentaria, otros pueden tener efectos adversos en la salud si se consumen en grandes cantidades o durante un período prolongado de tiempo.
Por lo tanto, es importante leer las etiquetas de los alimentos con cuidado y limitar el consumo de alimentos procesados que contienen grandes cantidades de aditivos.
A continuación, os dejamos una actividad interactiva con algunos de los existentes en la industria.
¿Cuál es la finalidad de los aditivos alimentarios?
Los aditivos alimentarios se utilizan por varias razones en los alimentos, pero principalmente para mejorar su sabor, textura, apariencia, conservación y seguridad alimentaria.
Los aditivos pueden mejorar el sabor de los alimentos, ya sea realzando su sabor natural o agregando nuevos sabores. También pueden mejorar la textura de los alimentos, haciéndolos más suaves o más crujientes.
Además, pueden mejorar la apariencia de los alimentos, haciéndolos más atractivos visualmente para el consumidor.
Los aditivos también se utilizan para prolongar la vida útil de los alimentos, previniendo el crecimiento de microorganismos y evitando la oxidación. Esto ayuda a garantizar que los alimentos sean seguros para su consumo y a reducir el desperdicio de alimentos.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que algunos aditivos pueden tener efectos negativos en la salud y que su uso debe ser regulado y controlado cuidadosamente.
Aditivo |
Función |
Ejemplos |
Efectos Secundarios |
---|---|---|---|
Colorantes | Agregar o intensificar el color de los alimentos | Golosinas, bebidas, alimentos procesados | Hipersensibilidad, reacciones alérgicas, hiperactividad en niños |
Conservantes | Prolongar la vida útil de los alimentos | Productos enlatados, embutidos, pan | Reacciones alérgicas, trastornos digestivos, alteraciones en la microbiota intestinal |
Antioxidantes | Prevenir la oxidación de los alimentos | Aceites, margarinas, alimentos fritos | Efectos gastrointestinales, alergias, interacciones medicamentosas |
Edulcorantes | Agregar sabor dulce sin aportar calorías | Bebidas light, productos para diabéticos | Trastornos gastrointestinales, aumento del apetito, posibles efectos carcinogénicos |
Estabilizantes | Mantener la textura y consistencia de los alimentos | Salsas, helados, productos lácteos | Reacciones alérgicas, trastornos digestivos, posibles alteraciones hormonales |
Saborizantes | Agregar o mejorar el sabor de los alimentos | Snacks, refrescos, comidas preparadas | Reacciones alérgicas, intolerancia, posibles efectos neurotóxicos |
Referencias bibliográficas
- Aesan – Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición. (s/f). Gob.es. Recuperado el 3 de marzo de 2023, de https://www.aesan.gob.es/AECOSAN/web/seguridad_alimentaria/subdetalle/aditivos_alimentarios.htm
- Abasolo, C. (2019, enero 24). Aditivos alimentarios y su clasificación Números E. BTSA.
- E160 – Carotenos. (s/f). Aditivos Alimentarios. Recuperado el 3 de marzo de 2023, de https://www.aditivos-alimentarios.com/2016/01/E160.html
- E621 – Glutamato Monosódico. (s. f.). Aditivos Alimentarios. Recuperado el 9 de marzo de 2023, de https://www.aditivos-alimentarios.com/2016/01/E621.html
- Glutamato monosódico: ¿es nocivo? (2022, 11 junio). Mayo Clinic.
- escador, D. (2018, octubre 5). No temas al glutamato monosódico. elDiario.es