Todas las personas se encuentran propensas a sufrir diferentes tipos de tendinopatías, aunque algunas más que otras dependiendo de ciertas características anatómicas y fisiológicas.
La tendinitis de pata de ganso es una de las lesiones más comunes que se pueden padecer. Se presenta mayormente en atletas debido a las grandes tensiones que reciben sus piernas durante los entrenamientos.
¿Qué es la pata de ganso?
La pata de ganso es una estructura compuesta por la unión de los tendones de 3 músculos: semitendinoso, recto interno y sartorio. Estos tendones se insertan en la parte interna de la rodilla y se encargan de estabilizarla.
Los músculos en esta zona contribuyen a que los movimientos articulares puedan realizarse correctamente. La tendinitis de pata de ganso ocurre cuando se inflaman los tendones de esta zona, creando dolor en la cara interna de la rodilla.
¿Cuáles síntomas produce una lesión en la pata de ganso?
El principal síntoma que puede aparecer es dolor en la región anterior y medial de la rodilla, dificultando actividades como caminar, correr o subir y bajar escaleras. Algunos otros que pueden aparecer son:
- Dolor a la palpación.
- Rigidez en la articulación.
- Inflamación.
- Dolor luego de permanecer mucho tiempo en reposo.
¿Qué ocasiona tendinitis de pata de ganso?
La tendinitis de pata de ganso puede ser generada por traumatismos, por no respetar los tiempos de descanso en los entrenamientos o por cargar un peso mayor al que el cuerpo puede soportar.
Descubre cuáles son los factores de riesgo más importantes a tener en cuenta para prevenir lesiones. Aprende paso a paso, un práctico programa de ejercicios para prevenir lesiones musculares.
Hay algunas personas con condiciones que las vuelven más propensas de padecer esta lesión, por lo que debes tener especial cuidado si posees alguna de estas características:
Genu valgo
El genu valgo es una deformidad en la que las rodillas se desvían hacia adentro y las piernas por debajo de ellas se separan. Esta condición presenta una desalineación del fémur y la tibia.
Es un causante de lesiones en la pata de ganso debido a que influye directamente en la distribución de las cargas que recibe la rodilla.
Debilidad en los músculos de la región glútea
Los glúteos son muy potentes y tienen funciones de rotación, extensión, aducción y abducción. Además, en esta zona se encuentra el músculo tensor de la fascia lata, uno de los encargados de producir la extensión de la rodilla.
Sobrepeso
Tener exceso de peso hace que las articulaciones aumenten la carga mecánica recibida, provocando que exista mayor riesgo de lesiones. En los pacientes con obesidad, la pérdida de peso se vuelve parte clave del tratamiento.
Pie valgo
Cuando al caminar se observa que la parte interna del pie tiene mayor contacto con el suelo se dice que existe una pisada pronada, causando inestabilidad y haciendo que el cuerpo sea más propenso a sufrir lesiones.
Este tipo de patología puede afectar al resto de extremidades inferiores al sobrecargar las articulaciones y crear deformaciones musculoesqueléticas.
Un pie valgo que no sea tratado a tiempo logra que las estructuras del cuerpo se formen con una inclinación inadecuada, generando diferentes problemas que también pueden afectar a la pata de ganso.
Dismetría de los miembros inferiores
Cuando hay alguna extremidad en las piernas más larga que la otra, un lado va a recibir mayor tensión que el otro y esta situación puede empeorar si también existe presencia de pie valgo o de genu valgo.
Esta dismetría puede ocasionar dolores muy frecuentes en los pies, los gemelos, las rodillas, los glúteos o incluso, la espalda.
¿Cómo saber si tienes una tendinitis de pata de ganso?
Usualmente, es bastante sencillo reconocer cuando ocurre algún tipo de lesión en esta zona debido a que se presenta un dolor bastante molesto justo en esa área de la rodilla, dificultando caminar o cualquier otra actividad que comprometa el movimiento de los tendones que conforman la pata de ganso. Sin embargo, por mencionar algunos otros rasgos que pueden complementar el diagnóstico están:
- Aparición de edema en una de las rodillas.
- Palpación dolorosa en la cara interna del muslo y la rodilla.
- Dificultad para flexionar y extender la rodilla.
- Dolor de rodilla incluso cuando se permanece en reposo.
- Molestias al afincar la pierna lesionada.
¿Cómo es el tratamiento para la tendinitis de pata de ganso?
Los profesionales pueden realizar diferentes tipos de terapias tanto para disminuir el dolor causado en los músculos como para ayudar a desinflamar y hacer que el proceso de recuperación del tejido y su funcionalidad sea mucho más rápido.
Estos son varios tratamientos de los más utilizados:
- Terapias manuales.
- Ejercicios excéntricos y de control motor.
- Uso de kinesiotape.
- Crioterapia o termoterapia (dependiendo del caso).
- Estiramientos de las articulaciones, respetando el rango de dolor.
- Electroterapia.
- Punción seca.
Los tratamientos caseros también pueden resultar, aunque los mejores beneficios son visibles cuando se acude a fisioterapeutas o traumatólogos que se encarguen de utilizar toda la implementación necesaria y creada para este tipo de patologías.
¿Cuánto tarda en curarse una tendinitis de pata de ganso?
El tiempo que tomará que alguien logre recuperarse por completo de una lesión en la pata de ganso dependerá mucho de su causa y del daño general que haya provocado al tejido que compromete el movimiento de los tendones en esta región.
Algo que influirá bastante en la regeneración del tejido será que el afectado tome el reposo necesario y se realicen estiramientos pasivos para evitar que se cree aún más rigidez.
El tiempo de rehabilitación puede llevar entre 2 y 4 semanas si se reciben las terapias y tratamientos adecuados, aunque puede extenderse en casos muy particulares.
¿Por qué el dolor en la pata de ganso es tan común en deportistas?
Este tipo de tendinitis es una de las más normales que aparece en los deportistas de cualquier categoría y puede llegar, incluso, a inhabilitarlos durante cierto periodo de tiempo. No obstante, afecta principalmente a los corredores.
Suele ocurrir debido al exceso de entrenamiento, por lo que es mejor saber cuándo parar. Traspasar el límite que resiste el cuerpo constantemente puede producir lesiones que terminan siendo contraproducentes y que solo te enviarán a guardar reposo durante muchos días.
Referencias bibliográficas
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- Gómez, J. G., Fairén, M. F., Haro, S. S. (2014). Tendinitis y bursitis de la pata de ganso. Orthotips AMOT, 10(3), 163-178.
- Muñoz Pérez, S. (2017). Efectividad de la punción seca en la tendinopatía de la pata de ganso en atletas (Bachelor’s thesis).
