Los deportistas que practican deportes de raquetas como, por ejemplo, el Bádminton o el Tenis y en deportes de equipo tales como Fútbol, Baloncesto, Balonmano, etc, tienen la necesidad de realizar acciones cortas a máxima o casi máxima intensidad de manera repetida con periodos de recuperación incompleta de manera frecuente a lo largo de sus respectivos entrenamientos y competiciones (9, 11, 18, 20, 23, 25).
En relación a lo anterior, podemos decir que los perfiles de actividad de los deportes de equipo requieren el desarrollo de la potencia, la aceleración, la velocidad y la capacidad de realizar repetidas carreras de alta intensidad y sprints (23).
¿Qué es el Repeated Sprint Ability?
El término Repeated Sprint Ability se introdujo por primera vez por Fitzsimons et al. (1993) (16) y hacía referencia a la capacidad de reproducir regularmente esfuerzos de sprint máximos. Hoy día el Repeated Sprint Ability se puede definir como la capacidad de repetir sprints o acciones máximas de manera intermitente, es decir, la realización de esfuerzos máximos o casi máximos (al menos dos) de menos de 10 segundos de duración, que son reproducidos de forma intermitente e intercalados con periodos de recuperación incompleta (normalmente menos de 60 segundos) (9, 14, 18, 21).
Los deportistas que participan en estas modalidades deportivas necesitan realizar de forma repetida sprints cortos (normalmente entre 1» y 7») a intensidad máxima o casi máxima, separados por breves periodos de recuperación (actividades de baja intensidad o pausas), durante un periodo de tiempo relativamente largo (entre 1 y 4 horas) (11) y desde un punto de vista fisiológico, estos deportes son generalmente clasificados como deportes intermitentes de alta intensidad (DIAI) (20).
Es importante diferenciar y no confundir estos dos tipos de ejercicio: ejercicios de sprints intermitentes y ejercicios de sprints repetidos (Repeated Sprint Exercise-RSE). Los ejercicios de sprints intermitentes se caracterizan por sprints de corta duración (≤ 10 segundos), intercalados con períodos de recuperación suficientes largo (60-300 segundos) para permitir la recuperación casi completa de rendimiento de velocidad (2,15). En comparación, los RSE se caracteriza por ser sprints de corta duración (≤ 10 segundos) intercalados con períodos de recuperación breves (normalmente ≤ 60 segundos). La principal diferencia es que durante el ejercicio intermitente de sprint hay poca o ninguna disminución de rendimiento (3,6), mientras que durante la RSE hay un decremento del rendimiento (figura 1).
Bioenergética de la Repeated Sprint Ability
Durante el ejercicio de alta intensidad (sprint) y corta duración (< 6 seg) la mayor parte de la resíntesis de ATP proviene de la ruptura de la fosfocreatina (PCr) y de la degradación del glucógeno muscular a ácido láctico, es decir, la energía se obtiene a través de la solicitación casi exclusiva del metabolismo anaeróbico (12, 17), pero si estos periodos de ejercicio a alta intensidad son repetidos o se prolongan en el tiempo, la contribución de estos procesos en la resíntesis del ATP pierde protagonismo y habrá un incremento del metabolismo aeróbico (13, 17, 22).Sin embargo, esta aportación por parte del metabolismo aeróbico no compensa la energía que proporcionaba el sistema anaeróbico y como consecuencia, no se puede mantener la potencia desarrollada, por lo que se produce una disminución del rendimiento (17).
En el estudio de Gaitanos, et al. (17) midieron los cambios en el músculo del ATP, PCr, lactato y piruvato durante un test de 10 x 6 s de sprint máximo en cicloergómetro y estimaron que durante el primer sprint la glucólisis anaeróbica contribuyó aproximadamente en un 50% y que en los últimos sprints la contribución de la glucólisis anaeróbica descendía sobre el 20%, sugiriendo que el metabolismo aeróbico contribuía de forma significativa en los últimos sprints.
Factores que influyen sobre el rendimiento en la Repeated Sprint Ability
Aunque en la actualidad los factores determinantes del rendimiento en Repeated Sprint Ability no han sido identificados, desde un punto de vista fisiológico, la literatura actual parece sugerir que para la Repeated Sprint Ability son importantes los siguientes factores:
– Potencia muscular (10).
– La condición física aeróbica (7):
El mecanismo de acción por el cual se sugiere que la capacidad aeróbica del deportista podría influenciar el rendimiento en Repeated Sprint Ability sería a través de la aceleración de los procesos de recuperación durante el ejercicio intermitente (24). En concreto, se cree que los procesos de resíntesis de PCr y el «aclarado» de lactato durante una prueba de Repeated Sprint Ability podrían verse mejorados en sujetos con mejores niveles de capacidad aeróbica.
– La capacidad tampón del músculo (7, 8):
Durante el ejercicio de alta intensidad, el glucógeno es utilizado para refosforilar ATP y de esta forma satisfacer las demandas energéticas de las fibras musculares en contracción. Por lo que se produce una acumulación de ácido láctico en el espacio intracelular, disociándose en lactato e iones de Hidrogeno(H⁺), lo que produce una reducción del pH muscular (acidosis) y por tanto una aparición de fatiga en el músculo esquelético (1, 19).
Valoración de la Repeated Sprint Ability
Hay una gran variedad de test propuestos por diferentes autores para valorar la Repeated Sprint Ability , los cuales no vamos a entrar en detalle en este artículo, que consisten en medir sprint en carrera o en un cicloergómetro con periodos cortos de recuperación entre los sprints (la duración o la distancia a recorrer en los sprints y los tiempos de recuperación varían en función del test o autor, incluso algunos introducen cambios de dirección en los sprints). Algunos ejemplos son: el test de Sprint de Bangsbo o el RAST.
La aplicación de pruebas de Repeated Sprint Ability permite valorar diferentes parámetros relacionados con la capacidad funcional del sujeto y obtener información relevante implicando la realización de pocos cálculos (5), como por ejemplo:
Mejor tiempo: Es el menor tiempo conseguido en los sprints efectuados.
Tiempo total o sumatoria de tiempos: Suma de todos los tiempos obtenidos en la prueba. Se trata del resultado global del test y puede ser considerado como un indicador de la capacidad para realizar ejercicio intermitente de máxima intensidad.
Índice de fatiga: En la literatura existen diferentes procedimientos para el cálculo del índice de fatiga (4, 16, 25). Básicamente, pretenden aportar información relacionada con el porcentaje de pérdida o disminución en el rendimiento durante la ejecución de sprints repetidos y sirven para representar el grado de fatiga y la capacidad individual para recuperar rápidamente.
- Índice de Bangsbo (4): el método aplicado por este autor consiste en obtener la diferencia entre el peor y el mejor tiempo.
- Índice de Wragg, et al. (25): Proponen calcular la diferencia entre la media de los dos peores y los dos mejores tiempos.
- El índice utilizado con más frecuencia en estudios de Repeated Sprint Ability es el de Fistzsimons et al. (16), ya que aporta información sobre cómo se produce la disminución del rendimiento a lo largo de la prueba.
Desde un punto de vista práctico podemos decir que aquel deportista que posea una buena Repeated Sprint Ability será capaz de desarrollar una alta potencia muscular durante el primer sprint y repetir este esfuerzo en sucesivas ocasiones con la menor perdida de rendimiento posible con respecto a su valor inicial. Un bajo nivel de potencia muscular inicial y/o una perdida rápida de la capacidad para repetir el rendimiento inicial durante sucesivos sprints nos llevaría a concluir que el deportista evaluado posee una pobre RSA (5).
Conclusiones sobre el Repeated Sprint Ability
En los deportes de equipo y algunos deportes de raqueta es necesario repetir acciones a máxima o casi máxima intensidad con periodos cortos de recuperación entre ellas. A esta capacidad se le conoce como Repeated Sprint Ability y depende de la potencia muscular, la condición física aeróbica y la capacidad tampón del músculo de la persona o deportista en cuestión entre otros factores.
Hay una serie de test físicos, con protocolos diferentes pero similares, con los que se puede medir o evaluar el Repeated Sprint Ability y que nos aportan información sobre el estado del deportista o la pérdida de rendimiento al realizar acciones máximas de manera repetida.
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Hola Alejandro! Excelente publicación. Estoy desarrollando una tesis sobre la presente temática y no logro encontrar el articulo de Fitzsimons et al. (1993). Existirá la posibilidad de que me lo facilites? Desde ya, muchas gracias.