¿En verdad somos conscientes de la gravedad de las lesiones?
Evidentemente, constituye el principal problema del deporte. Es un aspecto que afecta tanto en lo físico como en lo psicológico.
La actividad física es lo mejor que una persona puede hacer para mantener un buen estado de salud y mejorar la condición física.
El ejercicio físico regular proporciona importantes mejoras a nivel cardiovascular y respiratorios, así como en enfermedades importantes a nivel mundial como la obesidad, diabetes mellitus I y II, colesterol, hipertensión, etc. Aun así, el deporte tiene otra cara más amarga, como es el tema de las lesiones, que representan unos de los principales problemas en los deportistas.
Tipos de lesiones deportivas
Cuando el ejercicio se practica con frecuencia e intensidad inadecuada y superan la carga estipulada para cada persona pueden producirse dos tipos de lesiones: agudas y crónicas, la mayoría por sobrecarga o sobreutilización. Las lesiones agudas, se clasifican en musculares, ligamentosas y óseas. (2)
- Las más importantes y, por tanto, más graves son las lesiones musculares, desde el los desgarros, distensiones y contracturas, hasta roturas musculares de las fibras de un músculo. El músculo crece durante toda la vida.
- Las lesiones ligamentosas son los llamados “esguinces”, que en función de la gravedad se clasifican en Grado I, Grado II, Grado III. Muy diferente es la rotura de un ligamento, como la rotura del ligamento cruzado de la rodilla. Este evidentemente es mucho más grave.
- Las lesiones óseas, como las fracturas, son las menos importantes pero suelen afectar más en edades tempranas donde prima el crecimiento.
Un esfuerzo desproporcionado puede llegar a “romper” a un atleta, y si perdura y no mantiene los recomendaciones adecuadas y una buena recuperación, puede retirarle de la competición de por vida.
• Las lesiones crónicas suceden por no haber llevado un tratamiento de recuperación de esas lesiones agudas, o simplemente por sobrecargar o sobreutilizar por exceso. Una de las lesiones crónicas más importantes son la tendinitis, la bursitis y fracturas por estrés.
En muchas ocasiones, nos encontramos casos en que las personas se sienten cómodas consigo mismos sin tener en cuenta que en realidad no están correctamente recuperadas y, como consecuencia, no hacen caso a profesionales y recaen constantemente, sin tener ningún beneficio para la salud ni para rendimiento.
Varios estudios basados en su experiencia diaria con deportistas de élite, concluyen que el 90% de las lesiones están producidas por el propio entrenamiento, siendo la rodilla, el muslo y el tobillo las zonas más afectadas donde la estructura más dañada es: el músculo, seguido por el tendón rotuliano, el tendón de Aquiles, y los esguinces articulares. (3)
¿Qué hay que hacer ante una lesión?
En primer lugar, debemos de determinar el tipo de lesión, si aguda o crónica y dentro de cada uno estimar el grado en el que están perjudicados. Para ello, es vital siempre acudir a un médico.
En esguinces leves o contracturas, que no suponen mucho riesgo, con inmovilizar la zona, reposo absoluto y aplicar hielo, es suficiente. En ocasiones más graves debemos de seguir un plan individualizado propuesto por un médico, un profesional del deporte y fisioterapeuta. Debemos de saber con qué tipo de personas estamos tratando ya que cada persona es totalmente diferente a otra y , por lo que respecta, necesitará uno u otro plan. (4)
Prevención
Cuando se trata de lesiones deportivas, es mejor prevenir que curar. (1)
1 – El calentamiento es una de las partes que más influye en las lesiones. Un buen calentamiento prevendrá de todo tipo de contratiempos, también es verdad que no es una ciencia exacta y siempre puede haber excepciones que a pesar de calentar bien, desgraciadamente se lesionan, pero como se dice, es poco común. Para que un calentamiento sea efectivo, debe constar de 4 partes fundamentales, de las cuales explicaremos en otro articulo, debido a la extensión del tema:
- Calentamiento general
- Estiramientos estáticos
- Ejercicios propios del deporte
- Estiramientos dinámico
2- Evitar el sobreentrenamiento. No debemos de confundir el cansancio de la fatiga extrema, porque es de los mayores propósitos a poseer lesiones. El sobreentrenamiento es la sobrecarga o estrés desproporcionado que aplicamos a una persona que no es capaz de soportar.
3- Conocer las limitaciones y la preparación física de cada uno. Cada persona es diferente y a lo mejor el ROM es limitado y debemos de ajustar los ejercicios para que no supongan ningún riesgo.
Tratamiento
Se encuentran otros principios que dan lugar a un plan de prevención lesiones: (5)
- Multilateralidad y polivalencia de carga: saber qué cualidades físicas voy a entrenar dependiendo de la especialidad deportiva para prevenir el riesgo de deportes.
- Especialización: debemos de identificar el deporte en el que nos encontramos y aplicar la carga en función de esa disciplina.
- Individualización: llevar un plan de prevención de forma segura para cada uno, de forma estructurada, individualizada y personal. Atendiendo a las capacidades de cada uno.
- Alternancia o periodización: distribuir las cargas en el tiempo y repetir las mismas para que haya adaptación sin sobrecargar.
Conclusión
En muchas ocasiones no somos conscientes de la gravedad de las lesiones y las tomamos como un simple trámite, pues no es así. Siempre hay que intentar prevenirlas, pero también es cierto que muchas veces, por muy bien preparado que vayas a la prueba o la competición, un mala desgracia la puede tener cualquiera. Sino, los deportistas de élite nunca se lesionarían teniendo a los mejores profesionales, los mejores avances tecnológicos y métodos de prevención a su disposición. Tenemos que tener en cuenta que una lesión es un tema serio, hay variedad de lesiones, unas más graves que otras, y pueden volverse crónicas para toda la vida. Por tanto, nunca hay que pasarlas por alto y debemos de disponer de profesionales del ámbito deportivo a nuestra disposición. Es imprescindible cumplir los plazos de recuperación y llevar una rehabilitación progresiva y constante… Dar descansos, variedad y prevenir. En efecto, es el mayor enemigo del deporte.
Referencias bibliográficas
- Walker, B. (2010). Anatomía de las lesiones deportivas. Badalona (España): Paidotribo
- Bahr, R., Maehlum, S. (2004). Lesiones deportivas: Diagnóstico, tratamiento y rehabilitación. Madrid (España): Panamericana:
- Rodríguez Espinar, S. (1989). La nueva enciclopedia temática: actividad física y deportes. Barcelona (España): Planeta.
- Gimeno Marco, F. (2012). Implicaciones psicosociales de las lesiones deportivas. Monografía de Actividad Física y salud. Madrid: Diaz de Santos.
- Romero, D. (2010). Prevención de lesiones en el deporte: claves para un rendimiento deportivo óptimo. Madrid: Panamericana.