Con el aumento de la población las dietas que existen también lo han hecho. Consecuentemente, nuevas perspectivas están emergiendo desde este enfoque voluntario de elegir la inclusión-exclusión de determinados alimentos así como de determinados patrones, entre ellos, el ayuno intermitente (en inglés intermittent fasting).
Se hace por tanto obligatorio mostrar aquellos conocimientos que amparados en la evidencia científica, den una postura neutra y lejos de intereses, opiniones y decisiones personales. Es por ello que a continuación repasaremos los puntos fundamentales a conocer sobre este topic tan de actualidad.
Antecedentes del intermittent fasting
De acuerdo a Phillips MCL (2019)1 intermittent fasting puede ser definido como la abstinencia voluntaria de comer y beber durante períodos de tiempo específicos y recurrentes.
El principal motivo aludido para ello es que la investigación ha mostrado que tras 12-36 horas de ayuno, el cuerpo humano entra en el estado fisiológico de cetosis caracterizado por un bajo nivel de glucosa en sangre, agotando los almacenes de glucógeno hepáticos, y produciendo, también desde el hígado, cuerpos cetónicos derivados de la grasa, o también llamadas cetonas.
Con este escenario, De Cabo, R. and Mattson, M. (2019)2 dicen que el organismo responde minimizando los procesos anabólicos (síntesis, crecimiento y reproducción), favoreciendo el mantenimiento y reparación de sistemas, mejorando la resistencia al estrés, reciclando las moléculas dañadas, estimulando la biogénesis mitocondrial, y promoviendo la supervivencia celular, todo lo que aporta mejoras en salud y en la resistencia a la enfermedad.
Metodología
Esta revisión literaria se llevó a cabo por medio de una búsqueda electrónica de artículos literarios haciendo uso de la base de datos PubMed.
Las palabras claves empleadas fueron: intermittent fasting human; health. Para acotar la búsqueda, el boleano “and” fue usado.
A los artículos encontrados se les aplicó una serie de filtros (criterios de inclusión):
- estudios realizados con seres humanos
- artículos publicados entre el 04/04/2019 y el 04/04/2020
- artículos en inglés
- texto completo disponible
El número inicial de resultados fue de 747.
Después de una exhaustiva lectura del título, los artículos que no tenían relación directa con el objetivo principal fueron descartados. Luego tras de leer los abstracts (segundo descarte) y finalmente los artículos, 3 ítems fueron seleccionados basados en la información que proporcionaban.
La siguiente tabla muestra el proceso seguido.
Resultados y discusión
Fueron seleccionados finalmente 3 «reviews» para el objetivo de analizar el intermittent fasting en humanos.
Empezaremos mostrando los principales resultados del trabajo de Phillips MCL (2019).1
El ayuno como terapia en el síndrome metabólico, cáncer, ictus, esclerosis múltiple carece de evidencia.
En cuanto a su uso en neurodegeneración, no ha sido explorado como terapia en personas con la enfermedad de Huntington, Parkinson y Alzheimer. Sin embargo, evidencia indirecta ha sido proporcionada por estudios de dietas cetogénicas en estas patologías.
En epilepsia algunos estudios se han correlacionado con mejoras en el control de convulsiones y de los mecanismos adicionales que estabilizan la función sináptica.
Adicionalmente a estos resultados, Veronese N, Reginster JY (2019)3 analizaron el impacto de la restricción calórica, intermittent fasting y dietas vegetarianas en la salud ósea.
Los autores concluyen que aunque el tamaño de la muestra está limitada a un pequeño estudio y no hay información específica referente a fracturas, la restricción calórica, pero no el intermittent fasting, parece reducir la densidad mineral ósea pero no parece afectar a la calidad del hueso.
Evidentemente, con los resultados puestos en liza, realizar afirmaciones concluyentes corre el riesgo de premura y falta de profundización en este tema, pero lo que no se puede decir, son cosas que no están demostradas.
Muchos estudios descartados en este trabajo lo fueron por ser con ratones, que aunque puedan ser el paso previo a posibles nuevos y positivos resultados, aún están en fase experimental, y aunque extrapolables a humanos, no dejan de ser meras especulaciones.
Nuevos estudios necesitan ser hechos para intentar cerrar, o al menos aminorar, este gap del mundo de la investigación.
Conclusiones
- La sociedad está plagada de dietas y patrones alimentarios basados en muchas ocasiones en modas, en el «a mi me funciona», o simplemente sin saber por qué – o el que siempre se ha hecho así.
- El intermittent fasting o ayuno intermitente es una tendencia que a día de hoy, está siendo llevada a cabo por un número importante de personas.
- El intermittent fasting explica su fundamento teórico pero aún los hallazgos beneficios en la salud no están contrastados, salvo para algún caso en particular.
- Se necesitan nuevas investigaciones en este área de investigación.
Referencias
- Phillips MCL (2019). Fasting as a Therapy in Neurological Disease. Nutrients; 17; 11 (10). pii: E2501. doi: 10.3390/nu11102501.
- De Cabo, R; Mattson, M. (2019). Effects of intermittent fasting on health, aging and disease. N Engl J Med; 381:2541-51. DOI: 10.1056/NEJMra1905136
- Veronese N; Reginster JY (2019). The effects of calorie restriction, intermittent fasting and vegetarian diets on bone health. Aging Clin Exp Res; 31(6): 753-758. doi: 10.1007/s40520-019-01174-x. Epub 2019 Mar 22.
