Triatlón y muerte súbita cardíaca

Las probabilidades de sufrir un caso de muerte súbita cardíaca en atletas son entre 1/50 000 y 1/300000 casos (2). Si se quiere analizar en qué deportes existe una mayor incidencia de estos casos, no escontramos que son las especialidades deportivas del fútbol y del baloncesto en los que más casos de muerte súbita cardíaca se registran.

El principal motivo de esta situación es que se tratan de deportes que cuentan con un gran número de participantes en todo el mundo, lo cual, junto al exigente trabajo y esfuerzo cardiovascular que es necesario para su práctica, se sitúan en las primeras posiciones en este registro. Ahora bien, sino tenemos en cuenta el número total de participantes de cada modalidad deportiva la situación cambia, ahora nos encontrarmos con que los deportes en los que se registran un mayor número de casos de muerte súbita cardíaca son en los que es necesario realizar un gran esfuerzo físico de una manera prolongada (en los que prima la resistencia aeróbica).

Entre los que destacamos el ciclismo y la maratón (3, 7, 9, 12, 20). En el presente artículo analizaremos la relación entre la modalidad deportiva del triatlón y los casos de muerte súbita cardíaca entre sus participantes.

Muerte súbita cardíaca

Existen múltiples factores  que pueden ocasionar casos de muerte súbita cardíaca en deportistas, entre los que destacan (1, 3, 5, 13, 18, 19):

• Cardiomiopatía hipertrófica.
• Cardiomiopatía dilatada.
• Anormalidades congénitas en las arterias coronarias.
• Miocarditis.
• Displasia arritmógena del ventrículo derecho.
• Aterosclerosis coronaria.
• Síndrome Wolff- Parkinson-White.
• Síndrome congénito QT largo.
• Síndrome de Brugada.
• Taquicardia ventricular polimórfica catecolaminérgica.

Aunque cada vez se está avanzando más en el descubrimiento de los motivos y de las causas que originan los casos de muerte súbita cardíaca, se calcula que, actualmente, entre el 1 y el 7% de todos los casos registrados (en atletas, profesionales o no) tienen un origen desconocido. A pesar de ello, se cree que su origen se debe a desórdenes o anomalías de tipo eléctrico, debido que los sujetos que las padecieron no mostraron ningún tipo de anomalías morfológicas.

Triatlón y muerte súbita

El triatlón es una modalidad deportiva que requiere un gran estado de forma y una excelente preparación física para poder practicarla. Además, que se realice en tres medios o fases (fase 1 o natación, fase 2 o bicicleta y fase 3 o carrera) requiere de sus participantes un gran dominio de las diferentes técnicas (de nado, de bicicleta y de carrera) que lo componen, así como un excelente desarrollo de todas las capacidades físicas, entre las que cabe destacar la resistencia aeróbica, y una fortaleza mental para poder supererar con éxito la presente modalidad deportiva (4, 6, 16, 17). En sus respectivos artículos Matía et al. (10) y Miranda et al. (11) clasifican a esta modalidad deportiva como muy intensa y dinámica debido a que está integrada por componentes dinámicos y estáticos considerados altos.

Así que, ¿influye la práctica del triatlón en el riesgo de padecer muerte súbita cardíaca? Las diferentes investigaciones realizadas hasta la fecha muestran una incidencia de casos de muerte súbita cardíaca muy baja con respecto a esta modalidad deportiva, sobre todo en comparación con el resto de deportes (7). Algunos ejemplos más destacados son, por ejemplo, las investigaciones y estudios realizados por Manonelles et al. (8), Pérez et al. (14) y Pons (15), sobre la incidencia de la muerte súbita cardíaca en diferentes modalidades deportivas, en cada una ellas, únicamente se documentó un caso en el que la persona que la sufrió practicaba triatlón.

Si hacemos referencia a estudios más longitudinales, señalamos el llevado a cabo por Manonelles (9), dónde se analizan todos los casos de muerte súbita cardíaca ocurridos durante la práctica deportiva tomando como fuente de información el Registro del Estado español. En ese estudio, el triatlón se encuentra englobado junto a las siguientes modalidades deportivas: bádminton, BTT, esquí, pádel y pesca. Entre todas estas especialidades se produjeron un total de 10 caso de muerte súbita cardíaca, de los cuáles 7 fueron en hombres y 3 en mujeres, lo que corresponde al 5,55% del total.

Conclusiones

A pesar de que el triatlón es una modalidad deportiva que tiene un nivel de exigencia muy alto, las diferentes investigaciones muestran que la incidencia de sufrir muerte súbita cardíaca durante su práctica es muy pequeño.

Esto puede deberse a múltiples factores como por ejemplo que los deportistas son sometidos a rigurosos controles médicos, a que, debido a su exigencia, las personas con problemas abandonan su práctica antes de sufrir consecuencias fatales, etc. Debido a esta situación, es necesario seguir investigando sobre el tema para establecer el porqué de esta situación.

Bibliografía

1. Borjesson, M. & Pelliccia, A. (2009). Incidence and aetiology of sudden cardiac death in young athletes: an international perspective. British Journal of Sports Medicine. 43 (9): 644-648.
2. Drezner, J.; Pluim, B. & Engebretsen, L. (2009). Prevention of sudden cardiac death in athletes: new data and modern perspectives confront challenges in the 21st century. British Journal of Sports Medicine. 43: 625 – 626.
3. Drezner, J.; Harmon, K. & Borjesson, M. (2011). Incidence of sudden cardiac death in athletes: where did the science go? British Journal of Sports Medicine. 45 (12): 947 – 948.
4. Huddle, P. & Roch, F. (2012). Iniciarse en triatlón. Madrid: Tutor.
5. Kirwan, J.; Lundo, D.; McNeill, B. & Ward, D. (2011). Sudden cardiac death in athletes: a case review. British Journal of Sports Medicine. 45: e1.
6. Kleanthous, M. (2013). Manual completo de entrenamiento para triatlón. Madrid: Tutor.
7. Kunik, H. & Díaz-Colodrero, G. (2006). Las mil y una muertes súbitas en el deporte. Revista de la Federación Argentina de Cardiología. 35: 221 – 237.
8. Manonelles-Marqueta, P.; Aguilera-Tapia, B.; Boraita-Pérez, A.; Pons-de Beristain, C. & Suárez-Mier, M. (2006). Estudio de la muerte súbita en deportistas españoles. Investigación cardiovascular. 9 (1), 55 – 73.
9. Manonelles-Marqueta, P. (2011). Muerte súbita del deportista. Recuperado el 22/11/2015.
10. Matía-Francés, R.; Hernández-Madrid, A.; González-Ferrer, E.; Jiménez-Nacher, J. J.; Rodríguez, I.; Taboada, D.; Ruíz-Rejón, F. & Moro, C. (2007). Muerte súbita en el deportista joven. Cuadernos técnicos de estimulación cardíaca. 17, 47 – 58.
11. Miranda-Chávez, I.; Ilarraza-Lomedi, H.; Dolores-Rius, M.; Figueroa-Solano, J.; de Micheli, A.; Buendía-Hernández, A. (2012). Rehabilitación cardiaca en cardiopatías congénitas. Archivos de cardiología de México. 82 (2): 153 – 159.
12. Northcote, R. & Ballantyne, D. (1984). Reducing the prevalence of exercise related cardiac death. British Journal of Sports Medicine. 18 (4): 288 – 292.
13. Pachinger, O. (2009). Sports and sudden death. Herz. 34 (4): 257 – 258.
14. Pérez, A.; Resnik, M.; González-Zuelgaray, J. (2010). Muerte súbita en el deporte. Aspectos legales acerca de su prevención. Insuficiencia Cardíaca. 1 (5): 17 – 24.
15. Pons-de Beristain, C. & Manonelles-Marqueta, P. (2004). Muerte súbita del deportista. 20 años después. Archivos de medicina del deporte. 21 (100). 135 – 142.
16. Roberts, O. (2012). Manual completo de triatlón. L’Hospitalet [de Llobregat]: Hispano Europea.
17. Rossi, A. (2014). Triatlón: tú también puedes. Madrid: La Esfera de los Libros.
18. Rowland, T. (2011). Is the «athlete’s heart» arrhythmogenic? Implications for sudden cardiac death. Sports medicine. 41 (5):  401 – 411.
19. Sanauga, J. & Acosta, G. (2005). Cardiología del Ejercicio. Federación Argentina de Cardiología: Universidad Nacional de Catamarca.
20. VV. AA. (2004). El corazón hace también malas jugadas. Revista de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia. 63, 257.