El músculo bíceps actúa en la articulación del codo, permitiendo la flexión se estimula su trabajo, este artículo tratará sobre los aspectos a conocer.
Generalidades del Músculo Bíceps
En la articulación del codo, compuesta por el húmero, radio y cúbito, se encuentra la articulación radiocubital, la cual se mueve en un plano horizontal y transverso, brindando movimiento de supinación y pronación, y por el lado del codo, esta trabaja sobre el plano sagital, proporcionando movimiento de flexión y extensión del mismo (1).
Se compone de varios ligamentos, con lo cual la musculatura anterior del brazo está compuesta el músculo bíceps (bíceps braquial, braquiorradial y el braquial y pronador redondo), y estos son principalmente flexores del codo.
Por otro lado, se caracterizan por tener 2 cabezas (de ahí la terminología bíceps), además es considerado un músculo multiartrodial (junto con el tríceps), ya que trabaja en màs de una articulación, en este caso en el hombro-codo (2).
Dicho esto, este artículo tratará sobre cuatro de sus características principales del músculo bíceps, los huesos que intervienen, la articulación o articulaciones principales, las lesiones que pueden aparecer y algunos aspectos de como programar el entrenamiento orientado al músculo bíceps.
Características de los huesos y articulaciones del codo
La extremidad superior se compone de los huesos, articulaciones y músculos, a tal fin los huesos que intervienen son la escápula, el húmero, el radio, el cúbito y los huesos de las manos.
Dicho esto, el húmero es un hueso par, que se sitúa en el brazo, sus principales características son: es un hueso par y largo, presentando 2 epífisis y una diáfisis.
En la misma línea, Lloret Riera, M. (2012), menciona que en la epífisis proximal del húmero, hay una prominencia en la parte externa y superior denominada troquiter, y una anterior denominada troquín. Estos dos continúan las sendas crestas, donde se forman el canal bicipital (1).
Asimismo, en la articulación del codo se pueden encontrar tres articulaciones características:
- La articulación humerocubital (tróclea)
- La articulación humeroradial (condílea)
- La articulación radiocubital superior e inferior (trocoide)
Región del codo y sus articulaciones
En esta región, a nivel anatómico hay 3 articulaciones, pero funcionan como cuatro (2):
- La articulación humerocubital se une a la epífisis proximal del cúbito, conocida como articulación diartrósica del complejo troclear, como polea.
- La articulación humeroradial, se une a la epífisis proximal del radio, es una articulación condílea con superficies elipsoidales. Tienen en común que comparten el ligamento intrínseco anular del radio, el cual une la cabeza del radio con la cavidad sigmoidea menor del cúbico.
- Por el lado de la articulación radiocubital superior, une la epífisis del radio y la epífisis proximal del cúbito, es una articulación trocoide, asimismo la articulación radiocubital inferior une la epífisis distal del radio con la epífisis distal del cúbito.
Región del codo y sus movimientos característicos
Estos movimientos son característicos de las articulaciones mencionadas, lo cual la región del codo presenta 2 ejes de movimiento (3):
- En un primer eje, de tipo transversal, los movimientos que permite son de flexión y extensión de la articulación.
- Y en un segundo eje de movimiento, el eje vertical se observarán los movimientos de pronación (rotación interna) y supinación (rotación externa).
Dicho esto, se pueden encontrar los músculos del brazo que actúan en la articulación del codo, estos músculos se caracterizan por ser ventrales, y dentro de los músculos bíceps se encuentran el músculo bíceps braquial anterior y el músculo bíceps braquial, lo cual a continuación se detallan sus características.
Músculo bíceps que actúan en la articulación del codo
En este punto el músculo bíceps se caracteriza principalmente por ser ventrales, lo cual este grupo se haya el músculo bíceps braquial anterior y el bíceps braquial.
- El braquial anterior, es un músculo ancho que tiene su origen en el tercio medio anterior del húmero y membrana interósea, formando un vientre muscular que se inserta en la cara anterior de la apófisis coronoides del cúbito, donde su acción principal es la de flexor potente del codo.
- Por el lado del bíceps braquial, posee sus dos cabezas, la porción corta y la porción larga, este se inserta en la tuberosidad bicipital del radio, y su acción principal es la supinación. Además, solo flexiona el brazo cuando está en supinación.
Mecánica del Músculo bíceps
Al hablar de las acciones de la mano en relación a las actividades de la vida cotidiana, actividades expresivas o de movimiento, resulta que según Weineck, J (2013), manifiesta que la actividad de los flexores del brazo tendrán mayor protagonismo en comparación con la musculatura extensora del brazo (3).
Con el fin de conocer la musculatura anterior del brazo, compuesta por el bíceps braquial, braquiorradial, braquial y pronador redondo, es menester mencionar que los tendones brindan la estabilidad necesaria cruzando a articulación del codo, brindando principalmente seguridad a la misma.
En síntesis, se mencionarán las características, origen, inserción y función del Músculo Bíceps braquial, músculo braquial y braquiorradial.
Músculo bíceps braquial
Posee dos cabezas, la corta que se origina en la apófisis coracoides y la cabeza larga en el tubérculo supraglenoideo, se inserta en la tuberosidad del radio y está inervado por el nervio musculocutáneo.
Este músculo, presenta la particularidad de atravesar dos articulaciones, la del codo y la del hombro. En el codo, flexiona y supina el antebrazo, y la máxima acciòn de fuerza es sobre los 90º de flexión del codo.
La particularidad de este músculo, es su corto brazo de palanca, lo cual un mínimo acortamiento de sus fibras producirá un rápido y potente movimiento.
Músculo Braquial
Este músculo bíceps, se halla por debajo del bíceps braquial, donde se origina en la superficie anterior y distal del húmero, su inserción es en la tuberosidad del cúbito y se encuentra inervado por el nervio musculocutáneo.
El mismo, es flexor puro del antebrazo con una fuerza similar a la del bíceps braquial, además cuando el brazo está fijo, tracciona el tronco hacia él, además colabora en la realización del las flexiones de brazos.
Músculo Braquiorradial
El origen del Braquiorradial se halla en el borde lateral del húmero, la apófisis estiloides del radio es su inserción y se encuentra inervado por el nervio radial.
Tras lo cual, este músculo bíceps tiene como función principal desarrollar la fuerza máxima flexora, ya que se encuentra situado en la región del antebrazo.
Una ves descripto este grupo muscular, la particularidad del mismo es seleccionar lo ejercicios que prevengan las lesiones del mismo, en el cual en el siguiente apartado se habla sobre ello.
Lesiones que se pueden producir en el músculo bíceps
Por mucho tiempo las lesiones del músculo bíceps han sido estudiadas, buscando formas de tratamiento para recuperar la lesión lo mejor posible, y es donde Kokkalis ZT, Sotereanos DG (2009), mencionan que la rotura del tendón distal del bíceps se da sobre todo en hombres de mediana edad, deportistas, más aún quienes practican deportes de fuerza y de contacto (6).
Consecuentemente, las lesiones del músculo bíceps braquial, sobre todo en la cabeza larga ha sido por mucho el objeto de estudio de muchos profesionales Kokklais, Z.T. y colaboradores (2009) y màs tarde Krumm, D y colaboradores (2019), lo cual se ha definido que la mayoría de las lesiones son a nivel del tendón del músculo bíceps, mencionado en Chren, R.E. y colaboradores (2018), lo cual por desgaste de las partes blandas puede llegar a producir tendinitis, esto afectaría a la movilidad del hombro provocando inestabilidad en la articulación del hombro, y debido a la tendinitis o desgaste del tendón, podría llegar a provocar la rotura del bíceps (4, 5 y 6).
Dicho esto, y según las investigaciones de Chen RE, Voloshin I. (2019), sostienen que hay tres tipos de tratamiento dependiendo el grado de la lesión, estos pueden ser tratamiento no quirúrgico, procedimientos quirúrgicos para reparar la lesión y la cirugía (4).
En otras palabras, otro tipo de lesiones del músculo bíceps, son las que se dan por enfermedad o por trauma, lo cual en esta última Krumm D y colaboradores (2019), sostienen que puede deberse a entrenamientos intensos con poco tiempo de recuperación, a falta de estiramiento o uso de equipamientos inadecuados (5).
Asimismo, las lesiones más comunes se dan cuando el codo pasa de un estado de flexión completa a una extensión abrupta del movimientos, con lo cual podría llegar a provocar que el tendón del bíceps genere un desequilibrio de la síntesis del colágeno y esto lleve a la ruptura o tendinitis (6).
En síntesis, cualquier procedimiento quirúrgico tendrá como objetivo principal recuperar la zona dañada, buscando la restauración anatómica completa, reestablecer la funcionalidad del codo y del musculo lo mejor posible.
¿Cómo programar el entrenamiento para el Músculo bíceps?
Cuando se plantean programas de entrenamiento orientado a la hipertrofia muscular o ganancias de masa muscular, la tensión mecánica juega un papel muy importante, debido a que la musculatura debe ser inducida a generar estímulos óptimos para lograr las ganancias deseadas (7).
Baz-Valle y colaboradores (2022), en una revisión sistemática proponen diferentes volúmenes de entrenamiento con el objetivo de ganancias de masa muscular en el músculo bíceps (7).
En su búsqueda detectaron que los diferentes volúmenes son trabajados, tales como menos de 12 series semanales, entre 12 a 20 series semanales y volúmenes altos de 20 series semanales o más, tras lo cual el volumen de entrenamiento es altamente estudiado, pero para logar rangos aceptables de ganancias en la hipertrofia hay que tener en cuenta no solo la tensión mecánica, sino otros factores como:
- La cercanía al fallo
- La intensidad
- La frecuencia
- Y el tiempo bajo tensión.
En la misma línea, Pedrosa GF y colaboradores (2023), manifiestan que la intensidad de trabajo para el curl de bíceps podría oscilar entre el 50 al 70 %, lo cual en su trabajo de investigación involucraron un grupo de mujeres que trabajaron el curl predicador con mancuernas con una frecuencia de 3 veces por semana con una duración del programa de 8 semanas (8).
Aún así, además de las variables mencionadas, desde el punto de vista de la biomecánica de movimiento, a día de hoy ha sido objeto de investigación el Rango de Movimiento en relación a la inducción de la hipertrofia muscular.
Por consiguiente, si el objetivo es estimular el músculo bíceps, programar las variables con conciencia, dependiendo la persona y buscar diferentes rangos de movimiento, parecería ser una propuesta interesante de cara a las ganancias de masa muscular.
Dicho esto, seria interesante plantear diferentes tipos de ejercicios de bíceps que apunten a las ganancias de fuerza y de masa muscular en el músculo bíceps.
Conclusiones sobre músculo bíceps
Una vez realizado esta investigación se ha observado la importancia del músculo bíceps, en primera instancia para las actividades de la vida cotidiana, y para los deportistas de fuerza, de lanzamiento o de lucha, ya que a través del fortalecimiento de este grupo muscular podrá traer grandes resultados deportivos (6).
En contraste, el músculo bíceps el venerado en la sociedad en donde vivimos, con lo cual da cuenta de que una musculatura del brazo entrenada y voluptuosa dignificaría a la persona como «fuerte».
Y para optimizar el trabajo de la musculatura del bíceps, las variables a tener en cuenta son el volumen, la intensidad, la frecuencia, la cercanía al fallo, el tiempo bajo tensión y el rango de movimiento.
Para lo cual, es interesante plantear una correcta sobrecarga progresiva y uso de las variables para evitar lesiones, sobre todo en el tendón del hombro y en el tendón distal del bíceps.
Referencias bibliográficas
- Lloret Riera, M. (2012). Anatomía aplicada a la actividad física y deportiva 3ra edición. Editorial Paidotribo. Bandalona, España.
- Jo Ann Staugaard- Jones. (2014). Anatomía del ejercicio y el movimiento. Editorial Paidotribo. Bandalona, España.
- Weineck, J. (2013). Anatomía Deportiva 5ta edición. Editorial Paidotribo. Bandalona, España.
- Chen, R. E., & Voloshin, I. (2018). Long Head of Biceps Injury: Treatment Options and Decision Making. Sports medicine and arthroscopy review, 26(3), 139–144.https://doi.org/10.1097/JSA.0000000000000206
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Krumm, D., Lasater, P., Dumont, G., & Menge, T. J. (2019). Brachial distal biceps injuries. The Physician and sportsmedicine, 47(4), 406–410. https://doi.org/10.1080/00913847.2019.1620653
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Kokkalis, Z. T., & Sotereanos, D. G. (2009). Biceps tendon injuries in athletes. Hand clinics, 25(3), 347–357. https://doi.org/10.1016/j.hcl.2009.05.007
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Baz-Valle, E., Balsalobre-Fernández, C., Alix-Fages, C., & Santos-Concejero, J. (2022). A Systematic Review of The Effects of Different Resistance Training Volumes on Muscle Hypertrophy. Journal of human kinetics, 81, 199–210. https://doi.org/10.2478/hukin-2022-0017
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Pedrosa, G. F., Simões, M. G., Figueiredo, M. O. C., Lacerda, L. T., Schoenfeld, B. J., Lima, F. V., Chagas, M. H., & Diniz, R. C. R. (2023). Training in the Initial Range of Motion Promotes Greater Muscle Adaptations Than at Final in the Arm Curl. Sports (Basel, Switzerland), 11(2), 39. https://doi.org/10.3390/sports11020039
