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A día de hoy, un indicador de salud claro en las personas es el nivel de condición física que poseen. El nivel de condición física de cada persona nos dice como está a día de hoy. El nivel de AF que realicen ayudará a mejorar la CF, incidiendo directamente y, de una manera positiva, en la calidad de vida de las personas. En el presente artículo analizamos el papel que juega el ejercicio en hipertensos.
Hipertensión arterial, (HTA)
La hipertensión arterial, “HTA”, es uno de los factores de riesgo que, se define según (Alejandra, Cuenca, Estefania, Hernandez, & Vega, 2018) Como una enfermedad multifactorial asociada a los estilos de vida de la población, que contribuyen a la aparición de esta patología, entre los que se encuentra el consumo de alcohol, tabaco, alimentos con alto contenido en sal y grasas, sedentarismo, entre otros.
La presión arterial mide la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias desde que el corazón bombea sangre para el cuerpo. Hipertensión es el término que se utiliza para describir la presión arterial alta.
Una presión arterial al puede dar lugar a diversas patologías médicas, tales como patologías cardiovasculares, tensión ocular y otros problemas de salud.
La presión arterial se lee en dos números, el que pertenece a la presión sistólica y la presión arterial diastólica. Según (Martínez, 2000), la presión necesaria a fin de que dicho fluido, que es de naturaleza un tanto espesa, se mantenga en continuo movimiento. Esta presión, cuando toda la estructura funciona correctamente fluctúa entre 80 y 120 mm Hg.
En la hipertensión arterial según (Alfonso et al., 2017), El diagnóstico se hace en base a la toma de las cifras superiores a 139 mm de Hg de Presión Arterial Sistólica (PAS) y cifras superiores a 89 mm Hg de Presión Arterial Diastólica (PAD). Este límite inferior es aceptado, de manera generalizada, como el punto de partida del cual se incrementa, de manera significativa, la morbilidad y mortalidad relacionadas con esta enfermedad.
Con frecuencia la hipertensión arterial se produce en adultos y personas mayores.
Factores de riesgo que pueden provocar hipertensión
Según (Alejandra et al., 2018) existen diversos factores que pueden provocar HTA.
- Sociales y demográficos
- Uso de anticonceptivos.
- Perímetro Abdominal.
- Consumo de sal, tabaco, alcohol.
- Perímetro abdominal.
HTA en adultos, personas mayores y su relación con la AF
Se puede afirmar que, según (Martínez, 2000), el ejercicio en hipertensos regular dilata los pequeños vasos sanguíneos de la micro- circulación; incluso se postula que en el músculo entrenado aparecen nuevos capilares, que bien pueden ser los que antes se mantenían cerrados y que ahora se han abierto ante el estímulo funcional del ejercicio, o que efectivamente el organismo genera estructuralmente nuevos caminos para la circulación. Gracias a estos cambios vasculares provocados por la práctica regular de AF se reduce la resistencia generada por el paso de la sangre, y esto genera una disminución de la presión arterial.
Extraído de (Martínez, 2000)
La práctica de ejercicio en hipertensos también ayuda a reducir la concentración de lípidos en sangre. Según (Martínez, 2000), Los triglicéridos, el colesterol total y las lipoproteínas de baja densidad disminuyen en las personas físicamente activas, al tiempo que aumenta el colesterol de alta densidad. Todo esto representa un cambio favorable para la circulación pues implica el estímulo apropiado para detener y aun revertir el proceso arterioesclerótico al menos en sus fases iniciales.
Por tanto, comprobaremos que a medida que el peso de una persona disminuye, disminuirá también su presión arterial.
De la misma manera afirmamos que una disminución de la presión arterial provocará un desahogo para sistema circulatorio.
Estrategias de entrenamiento para hipertensos
La realización de ejercicio en hipertensos con frecuencia diaria ayuda a regular y prevenir la hipertensión.
Una buena estrategia de entrenamiento paras personas con hipertensión es la de realizar un tipo de actividad física que genere un efecto hipotensivo.
Provocaremos el efecto hipotensivo con:
- Intensidad de carga baja.
- Intensidad del esfuerzo media/baja.
- Ejercicios isométricos.
Otra buena estrategia para personas que padecen hipertensión es la de ganar fuerza para reducir el esfuerzo relativo en la actividad diaria. Esta ganancia de fuerza la provocaremos con entrenamientos:
- Intensidad de carga alta.
- Intensidad del esfuerzo baja.
- Volumen alto (10 series/semana).
Reducir 2 mmHg la PA reduce:
- Un 4% el riesgo de enfermedad arterial coronaria.
- Un 6% el riesgo de accidente cerebrovascular.
- Un 3% todo tipo de mortalidad.
- Se pueden salvar 11.800 vidas por año.
Deberemos jugar, por tanto, con los diferentes parámetros de la carga en los entrenamientos que vallamos a realizar con las personas hipertensas. Estos parámetros son:
- Intensidad.
- Volumen.
- Recuperación.
Recomendaciones
En sesiones de fuerza
- Ganar fuerza con cargas altas y esfuerzo bajo.
- Sesión multi-ejercicio con grandes grupos musculares.
- Intensidad esfuerzo (50%): 3 (6RM).
En sesiones con objetivo de generar efecto hipotensivo
- Favorecer efecto hipotensivo con cargas bajas e isométricos.
- Sesión multi-ejercicio con grandes grupos musculares.
- Intensidad esfuerzo (80%): 8-10 (12).
- Realizar ejercicio aeróbico después de la sesión.
- En ejercicios con MMSS y por encima de cabeza reducir intensidad esfuerzo.
- No realizar ejercicios invertidos y evitar la maniobra de Valsalva.
Dietéticas y de salud
Según (Carlos Zehnder, 2010) es muy relevante el ejercicio para hipertensos, pero también juega un papel fundamental la Nutrición. La alimentación actual, preparada con alimentos procesados y escasa en frutas y vegetales, además de ser rica en sodio, es pobre en potasio.
- Disminuir el consumo de sodio entre 1,2 y 2,3 g/día
- Aumentar el consumo de potasio por lo menos a 4,7g/día
Referencias bibliográficas
- Alejandra, V., Cuenca, P., Estefania, F., Hernandez, M., & Vega, M. (2018). Factores De Riesgo Asociados a La Hipertension Arterial En Adultos. Revista Navarra Medica, 4(1), 32–39.
- Alfonso, J., Salabert, I., Alfonso, I., Morales, M., García, D., & Acosta, A. (2017). Arterial hypertension: an international health problem. Revista Médica Electrónica, 39(4), 987–994.
- Carlos Zehnder, B. (2010). Sodio, potasio e hipertensión arterial. Revista Médica Clínica Las Condes, 21(4), 508–515.
- Mancia, G., De Backer, G., Dominiczak, A., Cifkova, R., Fagard, R., Germano, G., … Zanchetti, A. (2007). 2007 ESH-ESC Practice Guidelines for the Management of Arterial Hypertension: ESH-ESC Task Force on the Management of Arterial Hypertension. Journal of Hypertension, 25(9), 1751–1762.
- Martínez, E. (2000). La actividad física en el control de la hipertensión arterial. Iatreia, 13(4), 230–236.
Autor: Gonzalo Trujillo Pérez. Estudiante de Máster en Entrenamiento Deportivo, Actividad Física y Salud. Facultad de Psicología, Ciencias de la Educación y del Deporte. Blanquerna – Universidad Ramón Llull.
Publicación redactada por un alumno del Máster Universitario en Entrenamiento Deportivo, Actividad Física y Salud, de la facultad de Blanquerna (Universitat Ramón Llul).